Con goles de Lionel Messi, Rodrigo De Paul y Lautaro Martínez, Argentina se impuso en el clásico rioplatense. Con este resultado, quedó a seis de Brasil.
En una noche de mucho vértigo, que comenzó con dos atajadas fundamentales del Dibu Martínez a Luis Suárez, llegó la apertura del marcador con cierta fortuna, a través de Lionel Messi: La Pulga buscó a Nicolás Gozález dentro del área, el arquero Muslera quedó desconcertado y el balón ingresó pidiendo permiso para el 1-0 a los 38 minutos.
A los 44, Rodrigo de Paul, uno de los puntos altos de los campeones de América, se hizo de un rebote en la altura del punto penal y definió al lado del palo para decretar el segundo tanto antes del entretiempo.
Y en un complemento de absoluto dominio argentino, el tercero daba vueltas y finalmente se concretó a los 62. Messi aguantó la infinidad de marcas que lo perseguía dentro del área, limpió la jugada hacia la derecha con De Paul y Lautaro Martínez la empujó debajo del arco tras el centro rasante.
El ánimo en la cresta de la ola, el rendimiento futbolístico más destacado que nunca, un arquero que responde, una sólida defensa, mediocampistas que brillan partido a partido y delanteros que cumplen con el gol. Factores para el maravilloso momento que atraviesa el equipo de Scaloni.
El marcador pudo haber sido más extenso. Uruguay no hizo pie en el segundo tiempo y el dueño de casa impuso las condiciones, manejó los tiempos y protagonizó las ocasiones más propicias. Con Messi como cabeza en el ataque, el cuarto estuvo cerca de llegar en varias ocasiones. El palo, y buenas respuestas de Muslera lo impidieron.
Pero terminó siendo otra jornada mágica para la Selección, que espera con ansias el Mundial de Qatar para de una vez por todas dar el batacazo.
Así, Argentina sostuvo la racha invicta mas extensa del mundo y se afirmó en el segundo puesto de la tabla de posiciones con 18 puntos, a seis del líder Brasil, que empató sin goles con Colombia.