En Argentina, cada 26 horas muere una persona por violencia intrafamiliar. La mayoría de las víctimas son mujeres y niños. En el partido de General Pueyrredón, las cifras son crecientes y especialmente alarmantes.
En el marco de la urgencia por atender esta problemática, el pasado jueves 28 de octubre tuvo lugar en la sede del partido vecinal Crear una conferencia sobre violencia intrafamiliar, donde un panel de especialistas habló sobre cómo reconocer, prevenir y erradicar este tipo de violencia. El partido presentó el problema desde la experiencia de trabajo junto con su propuesta para dar una respuesta integral en las ciudades de Mar del Plata y Batán.
Fernando Navarra, primer candidato a concejal por Crear, abrió el conversatorio con una reflexión sobre la urgencia e importancia de poner foco en la violencia intrafamiliar y en extender a las víctimas soluciones reales desde el Estado municipal. “En Mar del Plata vemos un Estado ausente cuando se trata de casos de violencia. Son las ONG las que están tomando cartas en el asunto y las que tratan de brindar la respuesta que no da el Estado. De ahí la importancia de conocer el problema y aprender a acompañar cada uno desde su lugar. Con Crear traemos propuestas concretas para trabajar desde el Concejo Deliberante”.
La primera disertante fue “Pepy” Echeverría, especialista en sex coaching, coordinadora de la Fundación Impulsando Vida, que trabaja contra el abuso sexual infantil, y cuarta candidata a concejal por Crear.
Echeverría definió la violencia intrafamiliar como “toda acción u omisión protagonizada por uno o varios miembros de la familia, a otros parientes, afectando el cuerpo, las emociones, la sexualidad, la economía y la libertad”.
Desde su vasta experiencia en el campo de trabajo, explicó los diferentes tipos de violencia -física, sexual, emocional y patrimonial-. “Para identificar a una víctima tenemos que saber que genera mecanismos defensivos, siendo el más habitual la negación, que utiliza para disminuir su angustia. Tenemos que tener presente esta lucha interna de la víctima para ser pacientes si tiene comportamientos contradictorios con respecto a su agresor”, advirtió.
“El objetivo que persigue cualquier tipo de violencia es debilitar psicológicamente a su víctima para lograr la dependencia emocional de su agresor y así destruir su autoestima”. De manera que las mejores formas de sacar a la víctima del círculo de violencia es “estar siempre cerca y ayudarla a que se valore a sí misma”, concluyó Echeverría.
Fernando Knudsen, abogado especialista en el campo, expuso sobre la actual ley de violencia familiar y sus implicancias en cada caso concreto. Insistió en la importancia de “acompañar a la víctima, porque si no hace la denuncia no se puede hacer nada. No solo es difícil que haga la denuncia, sino sobre todo que la sostenga”, explicó.
A su vez, Knudsen invitó a profesionales a acompañar a las víctimas de violencia familiar que sufren vulnerabilidad social. “Hoy es clave el acompañamiento de psicólogos que puedan tomar pacientes ad honorem y sostenerlos durante el proceso de denuncia”, aseguró.
En cuanto a los lugares donde se puede realizar la denuncia por violencia contra la mujer, informó que “si bien cualquier comisaría debe tomarla, es conveniente dirigirse a la Comisaría de la Mujer”, que en Mar del Plata se encuentra en Juan B. Justo 3649.
Guillermo Boscarol, abogado y candidato a concejal por Crear, relató finalmente la propuesta que surge del partido vecinal para atender la problemática en la ciudad.
“Crear centros de contención a la mujer maltratada con el foco en los barrios de mayor conflictividad, integrados por psicólogos y personal idóneo en contención y conflictos familiares”.
“Generar programas de inserción laboral a través de convenios con empresas de la ciudad mediante un régimen de pasantías, para aquellas mujeres que sufren violencia de género, brindando beneficios tributarios a las empresas que formen parte del programa”.
“Si algunas de las mujeres que queden efectivas en las empresas y aún no ha terminado el secundario, un porcentaje del salario que abonen las empresas que forman parte del programa, irá destinado a cumplir el objetivo de finalizar sus estudios”.
“Establecer un Plan de Reeducación para aquellos varones de 18 a 65 años que hayan ejercido violencia hacia la mujer, con la que hayan tenido o tengan un vínculo de pareja, con la finalidad de modificar comportamientos violentos repetitivos”.