El escrutinio definitivo de las elecciones legislativas del 14 de noviembre de 2021 para los cargos municipales confirmó que 180.393 electores se abstuvieron de concurrir a las urnas, cifra que representa el 32.07 % del padrón habilitado de 562.279 electores de General Pueyrredon.
En la hipótesis que el ausentismo se hubiese constituido en una fuerza opositora a la actual gestión del intendente Guillermo Montenegro, habría superado los 168.779 votos que logró la lista de Juntos por una diferencia de 11.614 votos, y sí se suman los 13.441 votos en blanco, la ventaja habría sido de 25.055 sufragios.
Si bien la sumatoria de no concurrentes y de votos en blanco no se materializará en bancas, no dejan de ser un síntoma inquietante quizás de disconformidad, de apatía o desaliento, pero un enigma intrigante que plantea múltiples interrogantes a las fuerzas políticas representadas en el Concejo Deliberante.
Particularmente, el abstencionismo electoral y el voto en blanco interpelan a la actual gestión municipal, que dista de haber sido plebiscitada pese a la diferencia de más de 68 mil votos obtenida por la lista de candidatos a concejales encabezada por Fernando Muro en relación a la cosecha de votos de la principal fuerza opositora representada por el Frente de Todos.
En lo que respecta a la distribución de las bancas, el escrutinio definitivo ratificó la adjudicación de ocho escaños para el oficialismo y los cuatro restantes para el Frente de Todos, quedando fuera del reparto: el Frente Vamos Con Vos - Acción Marplatense, que desplazó del tercer lugar a Avanza Libertad por apenas 126 sufragios; el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, que se ubicó en el quinto lugar, cosechando 21.635 sufragios, y Crear que ocupó el sexto y último lugar, sumando 16.972 votos.