En medio de los insistentes rumores que circulan en el Palacio municipal acerca del posible desembarco de empresas foráneas que se quedarían con el del negocio publicitario, marginando a publicistas locales, el joven publicista Matías Wolf, a cargo de la empresa Wolf Publicidad SA, que posee banners publicitarios en columnas de alumbrado público, cuya concesión con el Emvial se renueva anualmente los 31 de diciembre de cada año, fue protagonista de una situación irregular que tiende a abonar dichos rumores.
En lo que parece ser un intento de desplazamiento en tal sentido, el pasado 10 de noviembre el publicista fue notificado por el EMVIAL, vía correo electrónico, que “debía presentarme ante la Oficina de Publicidad y Propaganda, perteneciente a la Subsecretaría de Inspección General para tramitar la renovación permiso, baje los formularios por internet y me presente con la documentación respectiva ante dichas oficinas, pero la empleada municipal me dijo que tenían orden política de no tomarme el trámite”, refirió a Cazador de Noticias.
Wolf comentó a este medio que “tengo la única empresa marplatense que tiene los permisos de los banners, desde hace tres años, los permisos de publicidad y Propaganda los tengo vigentes algunos por más tiempo, hasta el 2023, el 2025 y otros vencen el año que viene, pero los derechos que se paga al EMVIAL por el uso de una columna de alumbrado es anual”.
Ante la negativa de la empleada municipal de la dependencia, que funciona en Belgrano 3.467, aduciendo “causas políticas” por las cuales se le ordenó no recibir la correspondiente documentación, Wolf señaló que “a los dos o tres días fui a hablar con los superiores y me dijeron que no saben nada y que no me la pueden tomar, entonces volví a la Mesa de Entradas de la dependencia, pero con mi abogado y un escribano para que constate en un acta notarial que la empleada municipal decía que tenía orden política de no recibir nada, así lo hizo y como consecuencia de mi insistencia, finalmente, cambiaron de opinión y tomaron la documentación, todo lo cual hice que constara en el acta”.
“En lo que es publicidad de verano, usualmente las empresas de publicidad empiezan a contratar a partir de octubre para elegir los mejores lugares e ir armando el diseño a fin de llegar a tiempo, yo ya tengo todo vendido”, explicó el joven publicista y se manifestó preocupado.
“Lógicamente, estoy preocupado en caso de que no quieran seguir con el curso del expediente o que me vuelvan a metan alguna otra traba”, concluyó.