En su habitual columna semanal de Punto de Partida que se emite por la FM 101.9, el dirigente socialista Pablo Aceto abordó la polémica desatada luego de que el Gobierno Nacional aprobara los permisos para realizar estudios del subsuelo en tres áreas del Mar Argentino, a unos 300 kilómetros de la ciudad de Mar del Plata.
Sostuvo que “el debate que ha despertado el DNU del Presidente Alberto Fernández habilitando la exploración sísmica frente a las costas de Mar del Plata y otras localidades de la costa bonaerense, con la posibilidad concreta de explotación petrolera en ese sector, es, sin dudas, el resultado final de las políticas de entrega de los años '90”.
El dirigente socialista subrayó que “lo que se pretende hacer en la costa marplatense ya está pasando en otras regiones del país, la entrega de yacimientos, la entrega de las políticas energéticas al sector privado, que muchas veces se sienta sobre la producción para exigir y chantajear a fin de lograr así subsidios que garanticen su rentabilidad”.
Remarcó, además, que “hemos visto tanto en el AMBA como lo estamos viendo en Mar del Plata, la escasez de energía, lo cual demuestra el fracaso de esa política, por lo menos un fracaso en relación a los intereses de los ciudadanos y el interés nacional”.
Afirmó que “las privatizaciones han llevado a la Argentina a la arena de los pistoleros de la Industria, los mismos que fabrican guerras, no se preocupan por las cuestiones ambientales y, muchas veces, sentados en sus escritorios se dedican a conseguir ganancias en su relación con burócratas del Estado", señalando que "este es el problema que han traído las políticas que se remontan a los años ’90, que tuvo su muestra en la época del ex presidente Arturo Frondizi, pero que ahora se ha profundizado”.
Aceto enfatizó, también, que “las políticas energéticas argentinas nacieron bajo la perspectiva de un bien estratégico, de un bien para el desarrollo de la Nación, un desarrollo soberano, sostenido, con una fuente de energía abundante y barata, pero ahora estamos viendo todo lo contrario: una profunda crisis energética en todo el país y, sin embargo, todo se vuelca hacia el extractivismo y la exportación, subsidiando la producción y llevándonos a la explotación petrolera offshore, que muy lejos está de garantizar la posibilidad de que no existan accidentes”.
En tal sentido, planteó que “es fundamental discutir no solamente sí se explota petróleo frente a Mar del Plata, sino también las políticas energéticas en su conjunto”.
Destacó, también, que “en la Argentina hay mucha gente que no tiene acceso al gas natural y ni siquiera tiene acceso a la electricidad, y no estoy hablando de muy lejos, estamos hablando incluso en áreas de la provincia de Buenos Aires, que es una de las más ricas del país. Esto equivale a un cambio total en la mentalidad, volver a los orígenes que construyeron las empresas públicas de energía y no dejarlo en manos de pistoleros, que se debaten a ver quién es más rápido para manotear la ganancia y después no importa lo que ocurra, no les importa la precariedad y el desabastecimiento, que es lo que caracteriza a la energía en la Argentina”.
“Millones de dólares en subsidios y millones de recursos llevados a la bolsa de las petroleras extranjeras, esta es la cuestión de fondo para cambiar y por eso hay que poner en debate el fracaso de las privatizaciones en el área energética”, concluyó sentenciando.