En declaraciones a Punto de Partida en la FM 101.9, Gabriela Sánchez, hermana del capitán del buque pesquero “Repunte”, lamentó que “a causa penal está bastante frenada, desde el 2019 no hemos tenido ninguna novedad importante, para nosotros es fundamental que esto se mueva, pero lamentablemente el juez Lleral nos ha tenido sin ningún cambio en la causa”.
Asimismo, remarcó que “a partir del hundimiento del "Repunte" y del "Rigel" y después de tantas perdidas de vida, se ha comenzado a pensar qué pasa con los barcos, hasta antes del hundimiento del Repunte las únicas causas que se encontraban siempre eran las impericias del capitán o la causa del mal tiempo, y nosotros logramos poner en la mesa esta discusión que tiene como fundamento principal que no se repitan estas tragedias evitables”.
Refirió, además, que “los últimos siete hundimientos confirman lo que nosotros venimos denunciando, no han cambiado las condiciones estructurales de trabajo, y la otra cuestión es que para los empresarios un hundimiento es un negocio redondo, aunque parezca una paradoja, porque el barco siempre está asegurado en dólares, lo cobran a los pocos meses del hundimiento, siguen manteniendo el permiso de pesca y les aumentan la cuota”.
“A cinco años que se cumplen en junio del hundimiento del "Repunte" - prosiguió-, a los hijos del empresario Caputo - que siguen adelante con la empresa - les otorgaron por el barco hundido una cuota de ochocientas ochenta toneladas de merluza para que obviamente la pasan a los otros barcos que tienen y siguen ganando con El Repunte, además de cobrar a valores de un barco nuevo por un barco completamente obsoleto”
Finalmente, Gabriela Sánchez aseguró que “sin la anuencia de Prefectura y del Consejo Federal Pesquero y lamentablemente de algunos gremios, los barcos que se hundieron no podrían haber salido en las condiciones en que salieron y siguen saliendo”.