“Muchos trabajadores y trabajadoras, votaron a Macri porque en un spot en aquel momento dijo: “En mi gobierno ningún trabajador va a pagar el impuesto a las ganancias”, perdonen el exabrupto, pero los cagó”, aseveró el gobernador bonaerense Axel Kicillof en rueda de prensa, tras encabezar la asunción de Abel Furlán como nuevo titular de la UOM (Unión Obrera Metalúrgica), realizada en el Hotel Intersur 13 de Julio.
A renglón seguido, señaló que “cuando yo dejé de ser ministro de Economía, un millón de trabajadores pagaban el impuesto a las ganancias y volví como gobernador de la provincia de Buenos Aires y son dos millones".
"Eso fue Macri: la estafa y la mentira, pero el votito se lo quedó con la mentira y con el marketing. Hoy, a través de diferentes políticas del gobierno actual en el Parlamento, se redujeron esos dos millones a setecientos mil que pagan el impuesto a las ganancias, ha habido un avance en ese sentido”, agregó luego.
Asimismo, refirió que “a partir de la pandemia hubo una caída muy fuerte de la economía mundial, y después hubo una recuperación y ahí hay una primera diferencia porque hay países que después de la pandemia recuperaron menos en términos del producto bruto que como estaban antes de la pandemia, pero Argentina no tuvo un rebote porque un rebote es cuando la pelotita cae más bajo y después vuelve más bajo de lo que estaba, aquí ese rebote estuvo impulsado por un resorte de abajo que fueron las políticas públicas y esto permitió que la recuperación estuviera por encima de la pre pandemia”.
“Lo que pasa es que la recuperación mundial de la post pandemia es con mucha concentración - prosiguió -, o sea es una recuperación muy desigual y ahora hay que trabajar muy fuerte sobre eso. Todas las medidas de políticas públicas nacionales encaminadas a generar más igualdad en este momento son bienvenidas, por supuesto, pero necesitamos resultados rápidos porque obviamente sobre la situación que estoy contando vino una guerra en Europa, que es otra tragedia que genera una distorsión enorme de los precios mundiales, una excepcionalidad tremenda sobre determinados rubros porque el teatro de operaciones de la guerra es una zona que produce energía, uno de los grandes exportadores de energía es Rusia y luego sobre alimentos, que tenemos que Ucrania es uno de los grandes productores de trigo para Europa, pero el trigo no es que falta para Europa, sino también para el mercado mundial. Entonces, alimentos y energía con problemas y distorsiones muy graves, y le toca al Estado Nacional tomar medidas para aligerar esas distorsiones porque los efectos de la guerra llegan por el precio de los alimentos, por el precio y la disponibilidad de la energía y por la variable financiera”.
En tal sentido, remarcó que “vemos de nuevo que los Estados Unidos ante esta situación empiezan a subir la tasa de intereses y se convierten en una aspiradora de capitales, que afecta a los países en vías de desarrollo, periféricos o del Tercer Mundo como quieran llamarlos. Hay que tomar medidas y está muy bien que se estén tomando, después podemos decir tales medidas, más profundas o menos profundas”.
Finalmente, consultado sobre las declaraciones del intendente Guillermo Montenegro respecto a que "la inflación existe porque no paran de darle a la maquinita para ganar elecciones", Kicillof replicó que “yo le diría a todos los intendentes de la provincia para no personalizar, que den una mano, ayuden con algo, cuiden el bolsillo de la gente, basta de bla, bla, porque esto de que le dan a la maquinita porque el gobierno de Macri tuvo 53 puntos de inflación anual récord después de 20 años, y cuando dejó de emitir fue para no prestarle plata a la gente, entonces las restricciones, los ajustes que les gusta tanto, dicen que son para cuidar el bolsillo de la gente pero la liquidan, esos planes ortodoxos que aplicó Macri cuatro años seguidos llevaron al desastre, sí tienen un plan nuevo y han hecho una autocrítica , estoy dispuesto a escuchar; pero lo escuche a Macri decir que va a hacer lo mismo más rápido, así que quiere decir que nos va a liquidar en dos años en vez de cuatro”.