La Escuela N°1 Pascuala Mugaburu, celebró este lunes su 150° aniversario con un importante acto al cual asistieron diferentes personalidades de la ciudad que destacaron el aporte de la institución a la sociedad, entre otros el intendente Guillermo Montenegro, quien fue alumno de la escuela, el senador provincial, Pablo Obeid, la diputada provincial Débora Indarte, el secretario de Gobierno de la Municipalidad, Santiago Bonifatti, la presidenta del Concejo Deliberante, Marina Sánchez Herrero, acompañada por concejales, el obispo de Mar del Plata, Gabriel Mestre, el secretario de Educación de la Comuna, Sebastián Puglisi, y el rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP), Alfredo Lazzeretti.
La celebración tuvo lugar en el frente del establecimiento educativo, ubicado en la calle 25 de Mayo entre Mitre y San Luis, el que lucía decorado para la ocasión y donde se cortó el tránsito vehicular para que pueda desarrollarse la emotiva ceremonia del colegio más antiguo de Mar del Plata.
“Nos venimos preparando desde hace mucho tiempo para este festejo y poder ver acá a todas las autoridades, ex alumnos, ex docentes y a todo nuestro alumnado realmente me pone muy feliz”, destacó María Eugenia Domínguez, directora del establecimiento educativo inaugurado el 25 de abril de 1872 tras una donación de tierras de Patricio Peralta Ramos, antes de que la ciudad sea fundada.
Se refirió, también, a la pandemia y aseguró que la situación fue “muy difícil” y nos “atravesó a todos”.
“Ese primer año que la escuela estuvo cerrada y tuvimos que trabajar desde la virtualidad se complicaba. El año pasado, a mitad de año, comenzamos a abrir las puertas de la escuela con grupos reducidos. Hoy podemos decir que la escuela está abierta para todo el alumnado, los chicos vienen todos los días y sus docentes los están esperando”, añadió.
La directiva del establecimiento que en 1991 fue declarado “bien cultural de interés patrimonial” concluyó su alocución, manifestando que “a pesar de las infinitas adversidades económicas, sociales, culturales y pandémicas sigue siendo un establecimiento educativo que ha formado, y continúa formando, ciudadanos con sentido de pertenencia y comprometidos con sus raíces, con su presente y su futuro”.