Este martes, la fiscal María Florencia Salas elevó el pedido de prisión preventiva para Piero Pinna (34), acusado del asesinato de Maximiliano Rihl (42) hace un mes en el balneario Horizonte, por consiguiente, la Justicia de Garantías deberá resolver a la brevedad sí continuará en prisión hasta tanto se celebre un juicio oral.
Para la fiscal, Pinna disparó en la madrugada del 26 de junio sin ninguna justificación contra Rihl durante una pelea suscitada en el cumpleaños del empresario Mauricio Ríos y al cual ambos habían sido invitados.
Rihl recibió cuatro disparos, uno en un tobillo, otro en una rodilla, otro en una muñeca y el restante, el mortal, en la zona lumbar.
Según la reconstrucción preliminar de los hechos, Pinna había mantenido una pelea dentro del salón del balneario con otro hombre, Ariel Nuñez, al que acusaba de haberle faltado el respeto a su novio, Romina Ulloa. Tras esa primera pelea, Pinna se dirigió a su automóvil Toyota Corolla junto a Ulloa y tomó una pistola 9 milímetros con la que disparó contra Rihl, quien lo había seguido hasta allí.
En su declaración, Pinna dijo que reaccionó a los disparos previos que le había efectuado Rihl, circunstancia que también describió Ulloa. Sin embargo, la fiscal Salas no consideró esta versión como válida y, asimismo, relativizó un peritaje de dermotest positivo en la mano derecha de Rihl.
“Hay diversas maneras de que el residuo de pólvora llegue a la mano de una víctima que recibió cuatro disparos. Que puede ser por la acción volátil que provocan los residuos o por transferencia, a diferencia de lo que sostendrá el abogado defensor, que se apoyará en el dermotest y en la declaración del imputado y de la novia de éste”, explicó la fiscal.
“Las pericias balísticas e inspecciones oculares hechas, en primer término, determinan que la única arma que se utilizó es una pistola 9 milímetros Bersa, que es la que refiere el imputado y reconoce como de su propiedad", explicó Salas y agregó: “Las vainas halladas son todos 9 milímetros, no hay otro tipo de accidente balístico que se corresponde a la utilización de otra arma”.
Ante las evidencias físicas, la fiscal expuso que la versión de un enfrentamiento en el que Pinna se defiende un ataque armado de Rihl, solo la brindaron el imputado y su novia, Romina Ulloa.
“Tras estos testimonios, incluso, se realizó un nuevo relevamiento en el lugar y no se recolectó ningún accidente balístico. Y si bien es un lugar abierto, no hay un árbol con marcas, una víctima o un auto que haya recibido algún impacto. No hay marcas o evidencias de la utilización de otra arma de fuego distinta a la utilizada por Piero Pinna “, aclaró.