En un duro comunicado, los intendentes del PRO de la provincia cuestionaron a Axel Kicillof por su negativa de actualizar los montos acordados en diciembre pasado para obras de infraestructura. Los intendentes plantean que la inflación impactó sobre los trabajos que se podían realizar con esos fondos.

"Esta falta de respuesta es una nueva muestra de la discriminación que el gobierno provincial ejerce respecto de los municipios gobernados por Juntos", dijeron los alcaldes.

Semanas atrás, una comitiva de intendentes del PRO mantuvo una tensa reunión con Kicillof en la Casa de Gobierno en la que le plantearon la necesidad de actualizar los montos del Fondo de Infraestructura Municipal (FIM) y el Fondo para Seguridad.

Los intendentes plantean que esos montos se acordaron en diciembre pasado -junto con la discusión por el presupuesto- pero la inflación superior al 40% se comió parte de las obras planificadas por los municipios.

Desde esa reunión -en la que incluso algunos intendentes amagaron con levantarse y retirarse del Salón de los Acuerdos- a hoy no hubo respuesta por parte del gobierno provincial.

Los alcaldes plantean que los fondos fueron acordados en un contexto económico diferente al actual. "La inflación hace que no se puedan cumplir las metas oportunamente establecidas y la respuesta del Gobernador no puede ser achicar las obras", sostienen.

Advierten que el gobierno provincial recibe "cuantiosos" recursos discrecionales que llegan desde la Nación y que no fueron coparticipados con los municipios. Refieren a los $152.000 millones que se giraron, entre enero y julio de este año desde las arcas del Estado Nacional a la administración de Kicillof. Un número que duplica lo girado en el mismo período del año pasado, cuando se habían destinado $ 75.900 millones.

Se trata de Adelantos del Tesoro Nacional (ATN) que la Rosada envía de manera discrecional a las provincias por fuera de los fondos coparticipables que se distribuyen por ley.

Según plantearon, los intendentes buscarán avanzar con una legislación que que permita la coparticipación de todos los fondos que ingresan a la provincia de Buenos Aires. "Además, sabemos que hubo asistencia financiera directa y discrecional hacia los municipios oficialistas, y nos consta que existe discriminación en las obras públicas según el espacio que gobierna", advierten.

La relación entre Kicillof y los intendentes respecto de los fondos coparticipables siempre fue compleja. Esa tensión llegó durante la pandemia a generar roces incluso con los intendentes del Frente de Todos.

En abril de 2020 el Gobernador recibió cuantiosos fondos del gobierno nacional para palear la emergencia sanitaria. Kicillof distribuyó parte de esos fondos a los municipios, pero lo hizo en calidad de préstamo y con tasa de interés. Los alcaldes plantearon objeciones argumentando que si la provincia no debía devolver ese dinero a Nación, tampoco los municipios debían devolverlo a las arcas del Estado bonaerense.

Kicillof ganó la pulseada y los intendentes aceptaron esos fondos en calidad de préstamo y con intereses. Al día de hoy ese dinero sigue sin devolverse, toda vez que en cada negociación de presupuesto -cuando el Gobernador necesita de los votos de la oposición- los intendentes negocian una prórroga.