El radicalismo bonaerense llegó al último día previo al cierre de las listas para las elecciones internas del comité provincial sin tener definido de manera clara cuál sería el rumbo a tomar. Se hablaba de la posibilidad de un acuerdo, pero todavía no había una decisión puntual tomada al respecto. Sin embargo, los recientes dardos al diputado nacional Facundo Manes de parte de los dirigentes del PRO y también de la conducción nacional del partido centenario terminaron de acomodar las fichas.
En la Provincia todos entendieron que la defensa es prioritaria. Y que el famoso 40 por ciento recogido por el neurocirujano en las últimas elecciones internas de Juntos es un valor a aprovechar solo desde la unidad.
Con este marco de fondo, el oficialismo provincial, a cargo de Maxi Abad, como líder de Adelante Radicales, renovará la conducción del partido por un período más y el radicalismo bonaerense evitará las internas. El acuerdo se logró luego de que tanto Evolución como Protagonismo Radical, las líneas internas comandadas por el senador Martín Lousteau y el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, respectivamente, aceptaron continuar con este esquema sin la necesidad de resentir el espacio en la previa de las elecciones generales del 2023.
“Facundo Manes participó de manera activa para lograr la unidad e incidió mucho recordando que en las últimas elecciones internas el resultado final fue de 51 a 49”, le dijo a Data Clave una fuente consultada del possismo. Desde el lado de Abad también ponderaron el rol activo del diputado nacional.
Claro, no se trataba de un convenio sencillo. Hubo idas y venidas, pero el possimo consiguió quedarse con la secretaría general. Y, además, el jefe comunal de San Isidro también será delegado en el comité nacional.
Cabe recordar que las elecciones de 2021, que se atrasaron debido a la pandemia, fueron cuanto menos traumáticas. Tras cruces de todo tipo, con la Justicia de por medio, Abad logró imponer su fórmula con la actual senadora Érica Revilla como vice. Lousteau y Posse fueron unidos, pero no lograron la victoria.
Al igual que como venían funcionando las cosas, quedarán 14 delegados para Adelante Radicales y y 10 divididos en dos para las otras dos líneas internas.
Con este pacto, la UCR comienza a sellar una unidad que impactará de manera concreta rumbo a consolidar candidatos para las elecciones generales de 2023. “El radicalismo está unido y se prepara fuerte para ir por un presidente radical y un gobernador radical” sostiene en diálogo con este medio el diputado bonaerense de Espacio Abierto Juntos, Walter Carusso.
Eso sí, en el interior el acuerdo no se dio de la misma manera. Y habrá internas en algunos distritos algo que, según adelantaron, no resentirá la relación tras un convenio que dejó a todos satisfechos rumbo al objetivo principal del 2023.