La política ha dimitido 45 días después de su nombramiento, convirtiéndose en la mandataria británica con menos tiempo en el cargo. Anteriormente, el primer ministro más efímero fue George Canning, quien murió en 1827 tras 119 días en el cargo.
“Asumí el cargo en un momento de gran inestabilidad económica e internacional”, declaró Truss en una breve comparencia en el exterior de Downing Street. “Las familias y las empresas estaban preocupadas por cómo pagar sus cuentas”, afirmó.
En su discurso, Truss señaló que fue elegida “con el mandato de cambiar esto”. “Cumplimos con las facturas de la energía y con el recorte del seguro nacional y establecimos una visión para una economía de alto crecimiento con impuestos bajos”, agregó.
“Reconozco que, dada la situación, no puedo cumplir el mandato para el que fui elegida. He hablado con Su Majestad el Rey para comunicarle que renuncio como líder del Partido Conservador”, anunció.
La primera ministra británica informó que “habrá una elección de liderazgo que se completará dentro de la próxima semana”. “Esto garantizará que permanezcamos en el camino para cumplir con nuestro plan fiscal, y para mantener la estabilidad económica y la seguridad nacional de nuestro país”.