El gobierno de la ciudad de Buenos Aires se opuso a la decisión de Alberto Fernández de pagar con bonos del Estado nacional el incremento de coparticipación que ordenó la cautelar de la Corte Suprema de Justicia. Así, insistió en que el 2,95% se abonado en su totalidad con transferencias directas del Tesoro nacional.
“El Gobierno sigue sin respetar las instituciones”, afirma el título del comunicado emitido por la gestión de Rodríguez Larreta que exige el cumplimiento de la decisión de los cuatro supremos. Asimismo, argumentaron su pedido en que “la sentencia no afecta los fondos que reciben las provincias” y que “los recursos de la coparticipación se deben transferir diariamente y no pueden ser reemplazados discrecionalmente por otra forma de financiamiento”.
Este lunes, Alberto Fernández recusó a las autoridades de la Corte y comunicó que acatará el fallo y que el pago a la Ciudad lo hará a través de bonos. “Las decisiones judiciales son obligatorias aun cuando las estime disvaliosas e injustas. Respetuoso del Estado de Derecho buscaré revertir la mala resolución de la Corte y retomar la senda del federalismo observando y haciendo observar la Constitución como he jurado hacer”, planteó el mandatario a través de un hilo de Twitter.
Pese al anuncio del Presidente, la Ciudad presentó un escrito en la Corte Suprema en el que notificó el incumplimiento del fallo y solicitó que se arbitren los medios necesarios para que se acate el mismo. Asimismo, el comunicado recordó que se instruyó a la Procuración General “para que inicie una demanda penal a los funcionarios responsables de no acatar el fallo”. Por último, apuntó: “Tal como lo establecen las normas republicanas en un país con división de poderes, los fallos se cumplen, no se interpretan”.