La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) detectó trabajo ilegal y explotación infantil en un comercio de la localidad bonaerense de Pilar, tras descubrir que una menor de 15 años y su bebé de 3 meses vivían en el mismo establecimiento laboral y eran sometidos a condiciones de extrema vulnerabilidad y malos tratos.
El organismo conducido por Carlos Castagneto recibió una denuncia anónima que daba cuenta de la situación, por lo que rápidamente personal de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social se hizo presente en el lugar.
Allí, en una despensa de alimentos, se descubrió que los empleados habían sido traídos de Bolivia por la titular del comercio quién, además de propinarles malos tratos, los obligaba a vivir allí.
La menor de 15 años de edad, que se encontraba trabajando en el establecimiento con su niño de 3 meses, compartía un cuarto pequeño con la titular del establecimiento y manifestó haber llegado desde Bolivia en noviembre en un micro cuyo boleto fue abonado por su empleadora. A cambio de su labor recibía pañales, comida y a veces algo de dinero.
El otro de los empleados relevados manifestó recibir $40.000 mensuales por más de 10 horas diarias de trabajo. También señaló que en varias ocasiones lo dejaron encerrado dentro del local atendiendo detrás de una reja durante la jornada laboral.
El operativo se realizó en conjunto con la Dirección Nacional de Migraciones, COPRETI (Comisión para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil) y el ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires.
Se dio intervención a la Fiscalía Federal y al Juzgado Federal de Campana, que ordenó el inmediato allanamiento del lugar a cargo de división Trata de Personas la Policía Federal. Como consecuencia, dos personas fueron demoradas para averiguación de antecedentes. Intervino también el Programa Nacional de Rescate para realizar una evaluación socioambiental y activarlos protocolos pertinentes.