El secretario general de la CGT Regional Mar del Plata, José Luis Rocha, y el secretario general adjunto, Miguel Guglielmotti se apersonaron este jueves por la tarde, en la sede de la Asociación Marplatense de Propietarios de Automóviles Taximetros (Ampat), para expresar el apoyo de la central obrera al reclamo de las entidades y sindicatos que nuclean a taxistas y remiseros contra las aplicaciones de transporte ilegales.
En declaraciones a Cazador de Noticias, Rocha enfatizó que “estamos apoyando a los compañeros de taxis y remises en este conflicto que prácticamente ha creado el intendente, quien junto a sus funcionarios es el culpable de este conflicto, ya que él había firmado un acuerdo, comprometiéndose a no permitir las aplicaciones en la ciudad y hoy vemos que están permitiendo que trabajen a sabiendas que hay una legislación vigente que las prohíbe”.
Por su parte, Guglielmotti, quien además es concejal del Frente de Todos, remarcó que “hay una ordenanza vigente que prohíbe la circulación de aplicaciones en la ciudad de Mar del Plata y no se está cumpliendo; el Ejecutivo es quien tiene que controlar el efectivo cumplimiento de esa norma y eso es lo que no está haciendo por ello las distintas entidades y sindicatos de taxis, remises y autos rurales le hacen una denuncia al intendente Guillermo Montenegro por incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
Asimismo, señaló que “la discusión de una futura ordenanza se puede dar en el Concejo Deliberante”, dejando en claro que “nuestra postura es contraria a la cuestión de las aplicaciones porque son inseguras, ilegales y más caras. Por eso estamos apoyando a los gremios que están confederados y vamos defender el trabajo genuino que es el de los compañeros y compañeras de los remises y de los taxis. Este es el compromiso que nosotros venimos a plantear como CGT”.
A su vez, Guglielmotti, en su carácter de integrante del bloque de concejales del Frente de Todos, ratificó que su bancada rechaza “el aterrizaje de las aplicaciones en la ciudad de Mar del Plata por las cuestiones que ya he expresado: precarizan el trabajo, son inseguras y terminan destrozando a los dispositivos de transporte público que hoy tenemos, que son los taxis, los remises y los autos rurales”.