La defensora oficial de Matías Farías, principal acusado de violar y asesinar a Lucía Pérez en la ciudad de Mar del Plata el 8 de octubre de 2016, aseguró este martes que “no existió delito alguno” y pidió su absolución, al considerar que la falta de consentimiento por parte de la adolescente de 16 años “no pudo ser probada ni remotamente”, que la menor consumió cocaína “voluntariamente” y que según peritos es “altamente probable” que su muerte se debiera a una asfixia tóxica.
En su alegato de cierre ante el Tribunal Oral en lo Criminal 1 marplatense, María Laura Solari, a cargo de defensa de Farías (29), cuestionó a su vez la actuación de la fiscal inicial del caso, María Isabel Sánchez, quien sostuvo horas después del hecho que la menor había sido empalada y había muerto a causa del dolor producido por un abuso sexual.
Solari dijo que Sánchez “es la única persona que debiera estar sentada hoy aquí”, porque “todo lo que hizo generó una situación y un dolor inconmensurables”.
La defensora inició su alegato este martesen la sala de audiencia del sexto piso de los tribunales locales con la reproducción de declaraciones de la fiscal que estuvo al frente del caso, y que sostuvo la hipótesis del empalamiento, lo que aseguró que provocó “una sentencia condenatoria de toda la sociedad inmediata y unánime” sobre Farías y sobre el otro imputado, Juan Pablo Offidani (47).
“Todo lo que afirmó en el comienzo la doctora Sánchez es falso y no existirá forma de borrar esa idea”, dijo Solari, y sostuvo, en línea con lo que había adelantado en la apertura del juicio, el 7 de febrero último, que el empalamiento “jamás ocurrió” y que “sin pruebas en qué sustentarse se siguió buscando al violador serial”.
“No podemos dejar de resaltar que aún una investigación eficiente no hubiera arrojado un resultado distinto”, aseguró.