El expresidente le envió un mensaje al jefe de Gobierno porteño, quien se encuentra en horas de definición respecto al cronograma electoral en la Ciudad de Buenos Aires y cuestionó un potencial desdoblamiento de los comicios.
"No creo que Horacio desdoble las elecciones en la Ciudad. Sería ir en contra de los vecinos porque es más gasto del estado, más tiempo de votación, más filas, dos urnas, dos boletas", expresó Macri en diálogo con Radio Rivadavia.
En la misma línea, agregó: "Nunca se hizo antes en la Ciudad. No hay que cambiar las reglas electorales en el mismo año y no hay que hacerlas por especulaciones de una parte pensando que va a cambiar algo para complicarle la vida a la gente".
"Mis queridos porteños son autónomos e independientes. No vuelcan su voto hacia un espacio solamente por cambiar de día la elección. Desdoblar es complicarles la vida", indicó al tiempo que ratificó su intención de no competir en las elecciones del corriente año.
El exmandatario diagnosticó que la sociedad se manifiesta "a favor de un cambio", y "con menos paciencia contra los atropellos en su contra", y afirmó: "Me parece que tenemos un desafío que es no complicarle la vida a la gente y ser muy respetuosos".
"No cambiar reglas creyendo que de esa manera se va a manipular en algo el voto de los porteños que han votado lo que sistemáticamente creyeron que representaba sus ideas. No hace falta hacer ningún tipo de cambio que malgaste la plata de ellos", precisó.
Por otro lado, reveló que a pedido de Rodríguez Larreta se reunió junto al senador radical Martín Lousteau para buscar los mecanismos que le permitan competir "sin modificar la vida de los porteños". "Ese es el limite", indicó y remarcó que el jefe de Gobierno porteño no le consultó respecto al desdoblamiento en la ciudad.
Macri contó además que luego de "meses y un par de años de profunda reflexión, introspección interna y tratar de entender qué era lo mejor para los argentinos y lo peor para mí"optó por dar un paso al costado en la competencia electoral, y argumentó que apuntó con terminar con los caudillismos en la Argentina.
"No me fui, simplemente sentí que esto empoderaba mejor a nuestros dirigentes, que terminaba con estos caudillismos que le ha hecho daño a la Argentina, y que todos los argentinos nos empoderemos a favor del cambio. Todos tenemos que estar dispuestos a asumir un cambio profundo que vivimos del 2015 al 2019, respeto por el otro, cultura del trabajo, esfuerzo personal".
Y agregó, por último: "Hay que prepararse, no hay que improvisar, todas esas cosas se han entendido en la Argentina con lo cual me hace ser muy optimista acerca del futuro del país", subrayó.