Se realizó una emotiva jornada de reconocimiento al fallecido periodista Mario Trucco, un verdadero embajador de Mar del Plata, eximio escritor y dueño de una narrativa única, poseedor de una gran vocación por divulgar conocimiento y sostener el prestigio y la historia de su ciudad natal.Trucco supo transitar los pasillos de emblemáticos medios de comunicación y publicar libros que ayudaron a sostener el ejercicio de la memoria emotiva colectiva de Mar del Plata.
Hoy, a un mes de su fallecimiento, la Defensoría del Pueblo de General Pueyrredon impulsó una jornada de evocación sostenida en su figura y su impronta, que se llevó a cabo en el recinto de sesiones del Concejo Deliberante, a instancias de la titular del Cuerpo, Marina Sánchez Herrero.
Estuvieron presentes los defensores del Pueblo Fernando Rizzi, Daniel Barragán y Luis Salomón; Vito Amalfitano y Miguel Guglielmotti (FdT); Horacio Taccone (AM); colegas, allegados y amigos de Trucco, además de buena parte de su familia.
Luego de la apertura, Sánchez Herrero se refirió a la figura de Mario Trucco:
“Hay pocas personas que logran transformar su nombre y apellido en sinónimo de la ciudad donde hicieron toda su vida. Mario Trucco fue a lo largo de su existencia un embajador de Mar del Plata.
Su prestigio lo llevó de la mano de una plena identificación con el lugar donde forjó, no sólo los cimientos de su legendaria trayectoria profesional sino también las raíces de una familia y una amplia gama de afectos que siempre estuvo a su alrededor.
Hombre lúcido, intelectual consolidado, fue un periodista, historiador e investigador muy aferrado a la difusión de la historia de Mar del Plata. Su discurso, rico en matices, adjetivos y verbos, lo mostró siempre como alguien de palabra fácil pero no estéril.
Cada término expresado en el papel o en la oralidad tenía un objetivo de significado, una razón de ser para comunicar de manera didáctica y amena, para llegar fácil, sin complejidades y sin ruidos que pudiera complicar la interpretación.
Perfil bajo, amor por su vocación y un evidente sentido de pertenencia son algunos de los rasgos principales de una personalidad que dejó huella e hizo escuela. A él, seguramente, lo extrañaremos pero pudiendo recuperarlo de tanto en tanto a través de sus publicaciones. Y ése es su legado”.
Legendaria trayectoria
Publicó libros como “El Deporte y la Vida, 70 años de periodismo con identidad marplatense”.
Mario Trucco ha sido un periodista de Mar del Plata con una extensa y prestigiosa trayectoria.
Durante muchos años fue embajador de esta ciudad a nivel nacional e internacional al trabajar y destacarse en medios de ese alcance.
Se distinguió como comentarista deportivo, sobretodo de fútbol, destacándose en medios radiales, gráficos y televisivos.
Se inició en el diario La Mañana de Mar del Plata en 1948 y en LU9 Radio Mar del Plata en 1951. Desempeñó su rol en los más importantes medios de la ciudad y a nivel nacional alcanzó un relieve prácticamente sin precedentes para periodistas marplatenses, a tal punto que formó parte de la Cabalgata Deportiva Gillette y llegó a ser conductor del noticiero de Canal 11, a la vez que se desempeñó como comentarista de fútbol y otros deportes de los más grandes relatores.
Como marplatense atesora la dicha de haber trabajado, en el lugar de los hechos, en la cobertura de las tres conquistas más grandes de la historia de la Selección Argentina de fútbol: en la Copa de las Naciones que se adjudicó en 1964 nada menos que en Brasil y en el Maracaná; el título del mundo del 78 en nuestro país y la consagración de la Selección también como campeona del mundo en 1986 en México, siendo el único periodista marplatense en poder narrar esos acontecimientos deportivos.
Trucco fue el primer periodista marplatense en la historia acreditado a los Juegos Olímpicos, al ser enviado de LU9 para Roma 1960. Y dos años después ya trabajó en su primer Mundial, Chile 1962.
Fue distinguido como Ciudadano Ilustre de Mar del Plata por este Honorable Concejo Deliberante del Partido de General Pueyrredón en 1998. Y fue ya declarada de interés la presentación de su anterior libro, Mi pueblo se llama Mar del Plata, editado en 2015.
Recibió diversos reconocimientos de varias instituciones, entre ellas, el de Ciudadano Ilustre de Mar del Plata, distinción otorgada por el Concejo Deliberante del partido de General Pueyrredón, en 1998.
En 1993 se le entregó el “Lobo de mar al deporte y la cultura”, como comunicador social. Repitió el galardón en 2016, por su gran labor como periodista deportivo.
En 1997 fue galardonado con el premio anual del Instituto Superior Deportea “Al maestro con cariño”.
En 2004 fue el primero en recibir el premio “Manuel Álvarez Argüelles” que lograron otros referentes históricos de la radio como Magdalena Ruiz Guiñazú.
Desde 2019, una de las cabinas del estadio José María Minella lleva su nombre, así como otra en el estadio del Club Nación.
La última distinción, en 2022, fue la primera edición del premio "Comunicar MdP", organizada de manera conjunta entre el Círculo de Periodistas Deportivos y el Sindicato Empleados de Comercio, ambos de Mar del Plata