El primer mandatario viajó solo en avión hasta Mar del Plata, adonde arribó a las 14:30 y desde allí partió vía terrestre hasta el complejo de Chapadmalal , donde ya descansaba desde ayer su mujer, Fabiola Yáñez y Francisco, el pequeño hijo de ambos. Su arribo al lugar, en el que permanecerá hasta el domingo, fue apenas horas después de asegurar que no se sentía aislado por no haber sido invitado al acto en el que se conmemoraron los 20 años de la llegada de Néstor Kirchner al poder y al que él mismo había convocado la semana pasada.
Fernández, que el 25 de mayo de 2003 entró a Balcarce 50 como el jefe de Gabinete de Néstor Kirchner, fue el único de los socios políticos del Frente de Todos que no estuvo invitado a la celebración. Mientras que la vicepresidenta fue la única oradora, Sergio Massa se ubicó a uno de sus costados. En el escenario sí estuvieron algunos de sus cercanos como el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos; la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti; y los ministros Victoria Tolosa Paz y Gabriel Katopodis. Debajo del escenario estuvo el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, que aspira a competir en una interna contra alguno de los candidatos que designe Cristina.
Cerca del mandatario aseguraron que Fernández les dio vía libre a cada uno de sus cercanos para que decidiera qué hacer. “Si él mismo convocó al acto cómo les iba a decir que no fueran”, reflexionó uno de sus hombres de mayor confianza. Desde el entorno presidencial se respiraba alivio respecto de lo que fueron las palabras de Kirchner. “No sólo no le pegó, sino que volvió sobre lo que dijo en la entrevista con C5N y reconoció el trabajo que se hizo. Dijo que el gobierno fue infinitamente mejor que lo podría haber sido otro de Mauricio Macri”, mencionaron, con aires de alivio y satisfacción.