La Justicia cordobesa condenó a un productor ganadero a pagarle $2 millones a un empleado que lo denunció por explotación laboral. El hecho ocurrió en Coronel Moldes, en el sur de la provincia de Córdoba, donde el denunciante soportaba extensas horas, sin francos ni baño, hasta que escapó.
El empresario ganadero de esa localidad se llama Hugo Kuseman (82 años), considerado culpable por el delito de trata de personas, según el fallo del Tribunal Oral Federal (TOF) Nº 1 de esa provincia. Considerado culpable, acordó pagarle esa suma a un empleado que estuvo trabajando en el lugar durante 12 años para evitar la continuidad del juicio.
La sentencia precisó que el empresario contrató al empleado para ese trabajo y lo sometió al trabajo forzado: durante años, el empleador lo obligó a trabajar de lunes a lunes en jornadas extensas y en condiciones precarias, sin baño ni electricidad.
Según dio a conocer el portal La Voz de aquella provincia, el empleado no había podido renunciar porque necesitaba el dinero, pero decidió huir, al tiempo que su hermana hizo la denuncia en la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre), gremio que nuclea a los empleados de ese sector.
Conforme al fallo, al productor ganadero se le imputó haber explotado laboralmente a su empleado “a través del pago de salarios insuficientes, haciéndole cumplir jornadas laborales sumamente extensas de lunes a lunes, sin gozar de francos que le permitieran el descanso, en condiciones de habitabilidad deplorables, no tenía baño instalado ni electricidad”.
Así, la resolución judicial señala que Kuseman “se encuentra obligado al pago de la suma de dos millones de pesos ($2.000.000), pagaderos a partir del mes de junio, en dos cuotas iguales y consecutivas”.