Así sintetizó el referente del radicalismo provincial, Ariel Bordaisco, al finalizar la Convención provincial del radicalismo bonaerense, que ratificó la unidad de Juntos por el Cambio a nivel nacional y provincial, y determinó la vocación del partido de ser protagonista en la disputa de poder en las próximas elecciones.
“Esta Convención se trató de hacer lo que hay que hacer para transformar la provincia y el país. El partido reunió a 369 convencionales que debatieron y aprobaron una hoja de ruta que tiene un objetivo muy claro: gobernar para sacar al país de este presente tan triste”, dijo Bordaisco.
Y agregó: “Si lográramos como país escalar a todos los niveles el proceso democrático que ya es tradición en el radicalismo, las cosas serían diferentes. Aún con quórum y mayoría propios del espacio que lidera Maxi Abad, igual se abrió la discusión, se escucharon las diferentes opiniones y se votó. Esas son las señales que hay que dar para cambiar definitivamente la historia”.
“Adelante Buenos Aires logró el acompañamiento de los otros sectores, aún del possismo, que recurrió a la Justicia para frenar la Convención y su planteo fue rechazado en sede judicial”, amplió el legislador bonaerense. Esta referencia se debe a que los números finales de la Convención fueron 210 de Adelante Buenos Aires, 82 Evolución y 76 del possismo. Así, la presencia de todos los sectores, aún de los más controvertidos, legitimó y empoderó el liderazgo de Abad y de su espacio.
La Convención Provincial del radicalismo es el órgano de decisión más importante en el ámbito bonaerense, y es el foro en el que se deben decidir los ejes programáticos, el marco de alianzas y los acuerdos partidarios. También, en esta oportunidad, acordaron instar al gobernador Kicillof a que fije la fecha de las elecciones generales para que “deje atrás la especulación electoralista que, además de subestimar a los electores, provoca incertidumbre institucional para los vecinos de nuestra Provincia”.
“Tengo la absoluta convicción de que el radicalismo es el partido que aporta certidumbre al proceso político actual, porque tiene instituciones internas que regulan que los liderazgos no se conviertan en personalismos: hay líderes claros, pero hay partido, criterio colectivo y, sobre todo, democracia interna. Así se definen las cosas en la UCR”, finalizó Bordaisco.