Los médicos especialistas, conocidos como consultores del Sistema Nacional de Salud (NHS) en Inglaterra, iniciaron este jueves una huelga de 48 horas, causando una grave interrupción en los servicios sanitarios.

Esta huelga le sigue a otro paro de ocho días de médicos residentes que culminó la semana pasada en reclamo de mejoras salariales y mejores condiciones laborales.

Los hospitales ya agotados después de la reciente huelga de médicos residentes, están luchando para adaptarse a la ausencia de sus especialistas.

“Nuestros hospitales han tenido poco tiempo para recuperarse”, afirmaron autoridades del NHS, añadiendo que el impacto de esta huelga es más severo que cualquier otra medida de fuerza de este año.

Con miles de turnos ya pospuestos, la huelga dejó a muchos pacientes sin ver a sus médicos, y a los residentes sin la supervisión de sus superiores.

Nick Hulme, director ejecutivo de los hospitales de Ipswich y Colchester, señaló a la BBC que alrededor del 50% de los médicos están en huelga.

Hulme explicó la gravedad de la situación, comentando que si un anestesista no se presenta a trabajar, toda la lista de pacientes se ve afectada.

A su vez, Vishal Sharma, presidente del comité de consultores de la Asociación Médica Británica (BMA), dijo que sus miembros estaban “enojados” y “tocando fondo” tras años de aumentos salariales que no cubren la inflación.

“Estamos infravalorados y sobrecargados de trabajo. Este Gobierno nos está fallando a nosotros y a los pacientes”, expresó.

El vicepresidente de la BMA, Simon Walsh, agregó por su parte que tomar la decisión de ir a la huelga fue extremadamente difícil, aunque argumentó que los miembros del personal se sienten “desvalorizados” en términos salariales.

La BMA también anunció que los médicos residentes llevarán a cabo otra medida de fuerza el 24 y 25 de agosto, en respuesta a un “irrisorio” aumento salarial del 6% ofrecido por el Gobierno británico, lo que promete prolongar aún más este verano de descontento en el sistema de salud británico.