“El Estado está para acompañar a la clase media y a los sectores de bajos ingresos, solamente tendrán costo pleno aquellos que reciben un salario superior a los $730.000. Se trata de una distribución más justa de los subsidios”, señaló Royon en declaraciones radiales.
La funcionaria estimó que a partir del 1 de agosto quienes tengan altos ingresos o no hayan solicitado tarifas subsidiadas, recibirán boletas con aumentos estimados del “150% interanual”.
En el caso de los sectores de menores ingresos, aclaró que la suba tarifaria “estará muy por debajo de la inflación. Lo importante es cuidar a los sectores de bajos ingresos hasta que haya una recomposición salarial”, remarcó.
De todas maneras, aclaró que es “importante analizar bien la factura que se recibe, particularmente en términos comparativos a consumos anteriores”, aunque explicó que “solamente entre el 3 y el 5% de las familias de ingresos medios se pasa del tope de consumo”.
Por otro lado, la funcionaria adelantó que “a lo sumo el lunes de la semana que viene se van a conocer las condiciones de la licitación del nuevo gasoducto”, que permitirá el abastecimiento para las provincias del norte argentino.
“La licitación la estamos trabajando fuertemente para poder salir a lo sumo el lunes de la semana que viene, es una prioridad estratégica comenzar cuanto antes la reversión” del abastecimiento de gas para las provincias del norte, ante el declino de la producción en Bolivia, explicó Royón.