El ex tenista David Nalbandian fue denunciado por acoso y hostigamiento por su ex pareja Araceli Torrado, una denuncia que incluye, entre otras cosas, llamadas insistentes por parte del deportista, la instalación de una cámara en el ventiluz de la habitación del departamento para espiarla y el pedido de información confidencial a la seguridad del edificio.
Tras la separación, Torrado se mudó a un departamento que alquiló con ayuda de Nalbandian. Según relató la víctima, un día el ex tenista pidió ir al departamento sabiendo que su ex pareja no estaba, con la excusa de que tenía que realizar un trámite y sospechan que ese día instaló el dispositivo.
En junio de este año Torrado vio un brillo que le resultó raro en el ventiluz de su habitación. Con ayuda de su hermano pudo abrir la rejilla y encontró una cámara controlada por wifi que apuntaba a su cama y enviaba imágenes a un teléfono remoto.
Ante esta situación mantuvo una conversación con Nalbandian, donde el ex tenista reconoció haber instalado el dispositivo pero sostuvo que no pudo ver ninguna imagen por problemas técnicos.
La cámara fue llevada a la justicia y fue analizada por el cuerpo de investigaciones judiciales. Al no tener las claves de acceso de las claves no se pudo determinar si la cámara transmitió imágenes o no.
La fiscalía Nº18 de la Ciudad de Buenos Aires a cargo del caso decidió archivar la causa argumentando que las llamadas y la instalación de la cámara no constituían un delito. Esta decisión fue confirmada por la fiscalía de Cámara el 9 de septiembre que dejó abierta la posibilidad de que la defensa de Torrado presente pruebas de que efectivamente el extenista tuvo acceso a imágenes de la cámara o no.
En De Una, el abogado de Torrado, Martin Olari Ugrotte, aseguró que tienen pruebas de que Nalbandían si espió a su expareja. “Nosotros tenemos elementos para sostener que Nalbandian utilizó esa cámara para ver imágenes en forma remota. Tal es así que le preguntó a Araceli en una oportunidad ´¿ No te pensas levantar en todo el día?´. Es evidente que él vio esas imágenes”, dijo el letrado quien agregó que le pidió a la justicia una orden de restricción de acercamiento “porque es evidente que esta persona no reconoce límites”.
C5N obtuvo acceso a la comunicación entre Nalbandian y Torrado en la que el extenista reconoce haber instalado una cámara para espiar a su ex pareja.
Torrado: “Me parece patético que no seas capaz de reconocerme esto. Encontré la cámara, te vi la otra vez acá instalándola. Te vi queriendo ocultarme esa situación. No te olvides que estuviste todo el día preguntándome si yo iba a estar antes de las siete, a qué hora llegabas, que si yo podía dejarte acá porque tenías que pagarle no sé qué a qué gente. No me mientas porque no soy estúpida. No me mientas porque se trata de mi, de mi privacidad y de mi cuerpo y a mi no me deja tranquila saber que hay una cámara acá. Yo ya sé que la pusiste vos aunque te sientas un gil, no me lo quieras reconocer o lo que sea, pero sería mejor que me lo reconocieras porque fíjate cuanto más grave lo que estás haciendo de quererme hacer creer que la cámara está de antes o que la puso otra persona”.
Nalbandian: “En lo que estoy preocupado es en estar bien con vos y quiero encontrarle la vuelta para hacerlo”.
Torrado: “¿Por eso pones la cámara que da directo a la cama para ver si yo me acuesto con otro, cuando la otra vez me dijiste que no entendías por qué yo no quería acostarme con vos?”
Nalbandian: ¡¿Querés que sea honesto? Sí, la puse ese día. La pusimos ese día. No la pude ver porque no sé qué quilombo hay con internet, no se puede ver, así que no vi absolutamente nada. Qué pasó, qué no pasó, no sé nada. Si te acostas con alguien o no te acostas con alguien. Es como te dije, lo podés hacer ahí y lo podés hacer afuera, a cualquier hora, en cualquier día y en cualquier momento. No es por eso”.
Torrado: “Pero la pusiste vos”
Nalbandian: “La gente esa, sí.
Torrado: “Claro, la gente que contrataste vos para que te ponga una cámara para espiarme”.
Nalbandian: “No vi, no vi, no vi nada porque no anda. O sea no terminó andando. No sé nada. ¿Ok?”