Agricultores y productores alemanes realizan protestas en Berlín con una concentración de tractores ante la Puerta de Brandenburgo. El motivo es la prevista cancelación de exenciones fiscales para el campo por parte del Gobierno de Olaf Scholz.

En el marco del tractorazo, el presidente de la asociación de productores agrícolas, Joachim Rukwied, criticó duramente los planes del Gobierno de coalición: “No lo aceptaremos”. Se trata de “una declaración de guerra”, añadió, y si el Gobierno federal no retira las propuestas, los agricultores se asegurarán de que haya “un enero muy caliente” con nuevas protestas. “En ese caso, a partir del 8 de enero, estaremos en todas partes de una forma que el país nunca ha experimentado antes”, dijo Rukwied.

Un enero caliente

El dirigente señaló que la supresión de la normativa sobre el diésel agrícola y de la exención del impuesto de circulación para los vehículos agrícolas supondría para el sector una carga adicional de mil millones de euros al año (1.090 millones de dólares). Los productores contaban hasta la fecha con devoluciones parciales del impuesto energético sobre el combustible (diesel). La devolución asciende a 21,48 céntimos de Euros por litro: el tipo impositivo para el diésel agrícola quedaba así en 25,56 céntimos por litro, frente al tipo impositivo íntegro de 47,04 céntimos. Este tipo de ayudas se gestionaba a través de solicitudes de devolución a la administración aduanera. Además, los vehículos agrícolas y forestales estaban exentos del impuesto sobre vehículos de motor.

“Basta ya, ya es suficiente”, gritó el presidente de los agricultores en la manifestación ante la Puerta de Brandeburgo, a la que muchos participantes acudieron con tractores. Rukwied pidió al ministro de Agricultura, Cem Özdemir, presente en el acto, que presione al Gobierno en favor de los agricultores y las zonas rurales. Los recortes se basan en un acuerdo entre los líderes de la coalición del Gobierno para ahorrar en el presupuesto de 2024.

Ganancias en aumento

Los ingresos en la agricultura alemana habían mejorado recientemente, según datos del sector. Para el ejercicio 2022/23, finalizado a junio, la ganancia media de una empresa ascendió a EUR 115.400. Esto representa un aumento del 45% respecto al ciclo 2021/22. Sin embargo, ante la caída de los precios de los cereales, las oleaginosas y la leche, la asociación de agricultores ya había expresado su pesimismo sobre las perspectivas empresariales futuras antes de que se anunciaran los planes de semaforización.

El tractorazo del lunes -y las eventuales medidas de fuerza a partir del 8 de enero- no son las primeras de este tipo en Alemania. A finales de 2019, también tuvo lugar una gran manifestación con miles de agricultores de toda Alemania y un largo convoy de tractores frente a la Puerta de Brandenburgo. En ese momento, los agricultores exigían tener voz y voto en las normativas sobre protección del medio ambiente y los animales.