En la Cámara de Diputados esta semana se pudo escuchar a organizaciones y referentes de las distintas áreas que afecta la ley ómnibus que mandó al Congreso el Gobierno para tratar en sesiones extraordinarias.
Referentes de la comunidad científica, abogados laboralistas, de los Derechos Humanos, del movimiento de mujeres y ambientalistas abordaron en sus exposiciones todos los ataques que pretende implementar Milei con el mega decreto y la ley ómnibus. Aun así, por el martes a la mañana solo estaban presentes un diputado del PRO, tres de la UCR y pocos de Hacemos Coalición Federal (el bloque presidido por Pichetto).
El Gobierno, interesado en que el tratamiento de la ley avance de manera exprés y le cierren los números para la votación, está realizando reuniones en el despacho del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem y en el bar del Hotel Savoy, con los diputados de los bloques mencionados para avanzar en acuerdos.
“Estamos viendo reuniones en el edificio de enfrente, donde discuten un plan del dictamen con la oposición amiga, y a Caputo y Posse reunidos con el FMI para rendir cuentas, algo que acá tampoco se discute”, disparó la diputada del Frente de Izquierda, Myriam Bregman.
“Nosotros no negociamos, recibimos sugerencias”, repiten en el Gobierno para disimular el pacto que sellaron con bloques opositores por la denominada ley ómnibus. “Tuvieron que ceder”, festejan los aliados, sin contar las concesiones que ellos mismos aceptaron. El principio de acuerdo llegó después de intensas jornadas de rosca parlamentaria, al mejor estilo casta, y seguirá tomando forma este fin de semana. Si bien hubo avances, aún queda mucho por definir. Los legisladores del PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal ya recibieron el proyecto desmalezado por la Casa Rosada y se tomarán estos días para analizarlo. Las modificaciones incluyen retenciones, límite a las facultades delegadas y la no privatización de YPF, entre otros puntos. El objetivo del oficialismo es emitir dictamen y darle media sanción la semana que viene en Diputados, para comenzar cuanto antes el debate en el Senado. Ajustado por los tiempos, Milei se vio obligado a extender las sesiones extraordinarias hasta el 15 de febrero. El trámite parlamentario, ya sabe, no será sencillo.
Entre el Hotel Savoy y el despacho del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, se consumó el entendimiento con las fuerzas “amigables”.
En La Libertad Avanza confían en que las conversaciones llegarán a buen puerto y que el proyecto saldrá aprobado por todos los bloques salvo Unión por la Patria y el Frente de Izquierda.