En diálogo con Cazador de Noticias, el dirigente del Partido Socialista Auténtico de Mar del Plata – Batán, Pablo Aceto, advirtió que “la Argentina está a las puertas de enfrentar quizás la mayor crisis que es la crisis energética”.
Acto seguido, puntualizó que “a partir de los ´90, con las privatizaciones no solamente de las empresas públicas sino con la continuidad de la entrega de los recursos energéticos, la Argentina se encaminó hacia el colapso del área, que se manifestó a partir del 29 de abril de 2010 durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, mediante la resolución 342 del 2010, que establecía el Programa de Uso Racional y Eficiente de la Energía (PROURE), el cual fue el primer intento de actualización de los precios de los servicios energéticos, que llevó a valores impagables. En ese momento el gobierno dio marcha atrás y comenzó con el tema de los subsidios de los que tanto se habla ahora”.
“En ese momento – prosiguió- , planteamos que el subsidio era pan para hoy y hambre para mañana porque el problema de fondo era recuperar el control de los recursos energéticos y de los sistemas de generación, transmisión y distribución de la energía, pero nada de eso se hizo, se perdieron 14 años y ahora, también, entró en colapso el sistema de subsidios”.
Subrayó que “el modelo que plantea Milei no es otra cosa que la reafirmación del modelo económico de los 90, es que el servicio energético se dolarice y tenga precio internacional, lo cual convierte al país en inviable, de hecho los gobiernos de Cristina en el 2010 y de Macri después tuvieron que retroceder porque los costos de la energía hacen al país inviable porque la Argentina no tiene ni el consumo interno ni a nivel de comercio exterior la posibilidad de sostener y competir con estos costos de energía”.
Sostuvo que “la cuestión de fondo era y sigue siendo recuperar todo el sistema energético, los recursos, la generación, la transmisión y la distribución, pero nada de eso se ha hecho y hoy nos encontramos en una situación peor que la del 2010”.
“A partir de fines de abril y mayo se va a empezar a sentir el peso de estas políticas. Sin duda, la solución provisoria es restablecer los subsidios, pero esto no se puede eternizar. El problema de fondo es que no somos dueños de nada, ni siquiera de lo que está en nuestro subsuelo. Por lo tanto, no existe otro camino que pensar nuevamente en la recuperación del control de nuestros hidrocarburos y de nuestro sistema de generación, transmisión y distribución de energía eléctrica”, concluyó.