En el marco de la tercera sesión ordinaria del Concejo Deliberante, la concejal de Acción Marplatense, Eva Ayala, hizo uso de una cuestión de privilegio para acusar al oficialismo y el gobierno municipal por las “arbitrariedades administrativas” en el Cuerpo Deliberativo y sostuvo que “quieren un Concejo Deliberante expulsivo y amordazado”
“Se está afectando la dignidad del Cuerpo cuando no se permite la expresión de los vecinos de Serena. Vienen y los mandamos para su casa. Este ámbito deliberativo no escucha, no hace de caja de resonancia de lo que pasa en la ciudad”, planteó al referirse a lo ocurrido el miércoles en la Comisión de Salud, donde con el voto del oficialismo no se permitió hablar a un grupo de vecinos de barrio Serena preocupados por la situación del Caps de esa zona.
También, denunció las trabas que recibió su bloque para iniciar un expediente con un proyecto, ,que recién a las 72 se permitió su formalización: “es Insólito e inédito que esto suceda en este Concejo Deliberante”.
Asimismo, criticó la negativa del Concejo a otorgar el uso de la Banca 25 al Círculo de Periodistas Deportivos para opinar sobre el proyecto para instalar gigantografías de deportistas en los accesos de la ciudad y al Sindicato de Trabajadores Municipales para aportar su mirada sobre la licitación del Estacionamiento Medido.
“Más insólito es que cuando se están cumpliendo 30 años de la Banca 25, hoy estemos rechazando e incumpliendo el Reglamento. Se rechaza la Banca 25 porque no gusta lo que van a decir. La Banca 25 es un derecho de los marplatenses desde 1994”, recalcó.
“Vemos un grave deterioro institucional en este recinto” y “nos resulta insólito entrar en estas trampas silenciadoras aquí, donde tenemos que estar discutiendo los problemas y las preocupaciones de los vecinos y las vecinas de Mar del P lata”, agregó.
Mencionó que otro factor de deterioro institucional fueron las permanentes faltas de respuesta del gobierno a los pedidos de informe que se hacen en el marco del tratamiento de expedientes, lo que dificulta su avance, asegurando que “en lo que va del año ya son 168 los pedidos de informe sin respuestas”. Además, contabilizó que llegan a 400 las comunicaciones sancionadas por el Concejo desde 2019 que aún no fueron respondidas por el Ejecutivo.
También cuestionó la reciente decisión de la Comisión de Hacienda de limitar la discusión de la Rendición de Cuentas 2023 a preguntas y respuestas por escrito, sin la presencia física de los funcionarios en el Concejo, como se acostumbra. “Podemos cambiar el Concejo Deliberante por el Concejo Escribiente”, concluyó.