En un comunicado en el que acusó a “funcionarios y empleados” por “mal desempeño”, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, admitió que en los galpones de Tafí Viejo, en Tucumán, y Villa Martelli, en Vicente López, había comida próxima a vencerse y, por ello, ordenó al Ejército Argentino que reparta los insumos de inmediato. La decisión llega horas después de que Juan Grabois denunciara que el ministerio tenía 300 mil kilos de leche en polvo sin repartir a comedores que vencen en julio.
En el ministerio que conduce Pettovello, donde esta misma tarde echaron a Pablo de la Torre, secretario de Niñez y Familia y apuntado según los denunciantes, señalaron que llevaron adelante una auditoría y a partir de los resultados han “decidido limitar las competencias de los funcionarios y empleados responsables que, por mal desempeño de sus tareas, no han realizado un control permanente de stock y de vencimiento de mercadería”.
Y agregan que “a raíz de una información recibida sobre el estado y fechas de vencimiento de determinados productos adquiridos por el gobierno anterior” ponen en marcha “un protocolo para la entrega inmediata de los alimentos de próximo vencimiento por medio del Ejército Argentino para garantizar una logística rápida y eficiente”.
Este mediodía, el dirigente social Grabois había lanzado una dura acusación contra Pettovello: “Hay en los galpones del gobierno no cinco sino seis mil toneladas de alimentos; para colmo hay 339.867 kg de leche en polvo que rinden 2.718.936 litros de leche líquida que se vencen en julio y todavía no presentaron el cronograma de entrega. En total hay 924.970 kilos de leche. ¡Repartan la comida, sinvergüenzas!”, posteó.
Los dirigentes sociales que denunciaron la retención de las toneladas de alimentos apuntan a De la Torre como el responsable del área. Pettovello lo echó este jueves a la tarde, en principio por esta situación. Sin embargo, en el entorno de Pablo De la Torre señalaron que se mostraron “sorprendidos” por las versiones que corrieron durante el día porque “no hay ninguna firma, ningún contrato o designación que no cuente con la aprobación de la ministra”. Por lo tanto, infieren que la firma para entregar los alimentos dependía de Pettovello.
Tras el reconocimiento de Capital Humano, Grabois salió a marcar su denuncia: “Dijimos que había alimentos y había alimentos. Dijimos que se iban a vencer y se iban a vencer. Dijimos que había incumplimiento y había incumplimiento. Todo aceptado ahora por Pettovello”.
“Decimos que hay hambre y no se están entregando alimentos... ¡hay hambre y no están entregando alimentos! Sentido común gente. Déjense de joder y resuelvan esto. No es ideológico, es humano”, destacó en la red social X.