Según un muestreo territorial realizado recientemente por la organización “Somos Barrios de Pie”, el 92% de las familias que residen en los barrios populares de Mar del Plata y Batán sufre “inseguridad alimentaria” y no llega a cubrir mínimamente su alimentación básica.
Desde la organización advirtieron que el ajuste y la crisis económica presenta un alarmante impacto en los barrios más vulnerables, donde la situación “se agrava semana a semana” y “las familias no llegan a comer: algunas lo hacen solo una vez al día y otras resienten el alimento para que coman los niños”.
En el partido de General Pueyrredon se encuestaron a representantes de 67 hogares de barrios populares, donde residen un total de 275 personas, de las cuales el 31% son menores de edad.
Uno de los datos más alarmantes es que el 92% de los hogares encuestados experimentan “inseguridad alimentaria”, concepto establecido por la escala FIES de la Organización Mundial de la Salud, que lo define como “insuficiente ingestión de alimentos, que puede ser transitoria (cuando ocurre en épocas de crisis), estacional o crónica (cuando sucede de continuo)”.
En este punto, el informe repara en que el 65% de los hogares encuestados en Mar del Plata presenta “inseguridad alimentaria severa”, definición que no guarda sustanciales diferencias con el concepto de desnutrición.
Además, según este relevamiento, el 73% de las familias informó haber reducido su consumo de proteínas en comparación con el año anterior, con un 79% de estos hogares que no compensan esta reducción aumentando el consumo de ningún otro tipo de alimento.
En términos generales, el 66% de los hogares manifestaron haber reducido su consumo de alimentos en general. De ellos, el 88% tuvo un menor consumo de proteínas, el 98% redujo la ingesta de frutas, el 76% tuvo un menor consumo de alimentos altos en hidratos de carbono, el 84% consumió menos verduras y el 79% tuvo ingirió menos lácteos.
Además, tres cuartas partes de los hogares (75%) tuvieron que pedir dinero prestado o endeudarse para llegar a fin de mes, con porcentajes aún más altos de inseguridad alimentaria entre estas familias.