El intendente Guillermo Montenegro en uso de las facultades concedidas por el voto mayoritario de la bancada de Juntos por el Cambio, en la sesión ordinaria del 14 de marzo, dispuso decretar el aumento del boleto a partir del 1º de julio, en que la tarifa plana pasará a costar de $750 a $940. , lo que representa un incremento del 25%. En los últimos cinco años la suba es de casi un 5.000%
El jefe comunal justificó el boletazo arguyendo que “quedó en evidencia que la inflación durante el periodo analizado repercutió directamente en la viabilidad financiera del sistema de transporte urbano”, añadiendo que “esto, sumado a la indefinición del sistema actual de subsidios, hace necesario recomponer el precio del boleto, como lo han venido haciendo todas las ciudades del interior durante los meses en curso, en valores similares”.
De esta manera, una vez más se asesta un nuevo golpe al bolsillo de los usuarios que deben padecer un servicio caro y pésimo.