Miles de manifestantes se reunieron frente a la residencia privada del primer ministro Benjamín Netanyahu en Cesarea, Israel, en el marco de un llamado a elecciones anticipadas, mientras que otros cientos de personas se reunieron cerca de la casa del primer ministro en Jerusalén y en la base Kirya de las Fuerzas de Defensa en Tel Aviv.
En la jornada de sábado, se dio la protesta más convocante hasta el momento, donde en la plaza de la Democracia en Tel Aviv, foco también del masivo reclamo contra la reforma judicial, los manifestantes escucharon a familiares de los rehenes frente al Ministerio de Defensa, en la base militar de Kirya.
La manifestación principal en Cesarea se celebró para exigir que el gobierno “fije inmediatamente una fecha para las elecciones a la luz de la negligencia del sur y del norte y su vergonzoso fracaso en devolver a los rehenes”, de acuerdo a los organizadores de la protesta.
Decenas de miles de israelíes siguen desplazados de comunidades fronterizas en el norte y sur del país desde que la masacre de Hamás del 7 de octubre desató la guerra en curso en Gaza y Hezbollah comenzó a lanzar ataques desde el Líbano al día siguiente.
Las protestas, que ocasionaron grandes congestiones de tránsito, se produjeron en el quinto día consecutivo de lo que los grupos de protesta llamaron una “semana de perturbación”, con el fin de reemplazar al gobierno.