El 11 de junio pasada Casa Rosada sacó un comunicado en el que hizo un punteo de lo que el Gobierno consideraba eran los hitos alcanzados durante los primeros seis meses de gestión. Entre los puntos destacados se encontraba la “eliminación de la emisión monetaria para financiar al Tesoro”. Al mismo tiempo, una vez aprobada la Ley Bases y el Paquete Fiscal, el propio Javier Milei anticipó que comenzaría una nueva etapa de “emisión cero”. Sin embargo, hasta ahora los números muestran que el Presidente que venía a terminar con la emisión, alcanzó niveles récords en la ampliación de la base monetaria.
En el transcurso de los primeros seis meses de gestión, se emitieron más pesos (muchos más) que durante el primer semestre de 2023. En ese período del año pasado, bajo la administración de Alberto Fernández, la base monetaria había crecido en un 13%. En los primeros seis meses de gobierno de Javier Milei, la base monetaria se amplió en un 100%.
Para clarificar: en el primer semestre de 2024, el incremento de la base monetaria fue de $8,9 billones, mientras que en el mismo período del año anterior apenas alcanzó los $0,7 billones.
A pesar de ello, el Gobierno ahora reflota la promesa de campaña de Javier Milei y asegura que de ahora en más sí cumplirá con la consigna de “emisión cero”.
Para ello, el plan de Luis Caputo consiste en mantener el presunto superávit y avanzar con la eliminación de los pasivos remunerados del BCRA (los pases) para terminar también con la emisión por intereses.
Pero lo cierto es que mantener el superávit no será una tarea sencilla ni segura, dado que depende de medidas transitorias que podrían cambiar en los próximos meses. El mes pasado, el impuesto PAIS aportó un 7% de la recaudación fiscal total, pero es uno de los gravámenes que Milei prometió disminuir en agosto y eliminar para el próximo año.
Por otro lado, las retenciones a la exportación del agro también están a la baja dado que muchos productores han elegido no liquidar su producción aduciendo un fuerte atraso cambiario. En junio, las retenciones representaron apenas un 3,8% de la recaudación cuando en otras épocas aportaban cerca del 10%.
Así, el superávit fiscal que celebran Milei y Caputo se pone en jaque y con ello su plan de “emisión cero” también podría tambalear.