Ante las últimas noticias económicas, el dirigente de izquierda Alejandro Bodart (MST-FIT Unidad) analizó: "Es evidente que a Milei no le creen ni siquiera los patrones para los que gobierna. Por un lado, los sojeros retienen la cosecha, pese a que tienen un dólar privilegiado. El FMI exige devaluar, pero los bancos no creen que el gobierno y su ministro de Economía, puedan pagar los 'pases' comprometidos. Y además, la caída vertical de la recaudación por la recesión indica que, a pesar del ajuste, el pronóstico es malo. Con el desastre económico que está causando, el único Nobel que merece Milei es al vendehumo del año".
Bodart completó: "Lo que se discute sobre el riesgo país, caída de bonos o el salto en el dólar expresan la disputa entre distintos sectores capitalistas, de las finanzas y el FMI, mientras la situación del pueblo trabajador es insoportable. Una nueva devaluación, como piden los sojeros y el Fondo, sería un nuevo mazazo al bolsillo popular. Por eso el gobierno juega con fuego. Muchos que se dicen opositores, dejaron pasar la nefasta Ley Bases, están dejando pasar los despidos, dejando pasar todo… La CGT y las CTA deberían llamar al paro y plan de lucha, pero no lo hacen. Es importante que los sectores combativos, la coordinación independiente y la izquierda nos sigamos organizando para luchar por derrotar este plan de hambre, enfrentar los despidos y arrancar un aumento general de emergencia para salarios, jubilaciones, los programas y presupuestos sociales".