Los últimos números publicados por el Indec muestran una caída de la actividad de la construcción del 32,6% en el quinto mes del año, en comparación con mayo del año pasado. La caída es notoria, pero está dentro de lo esperado, teniendo en cuenta la decisión del Gobierno nacional de frenar la obra pública.
Para medir la actividad de la construcción, el Indec relevó el nivel de demanda de los principales materiales utilizados para la realización de cualquier proyecto. Los resultados fueron contundentes. La venta de asfalto, por ejemplo, se contrajo 47,8%, mientras que el hierro redondo decreció 48,9% y los mosaicos graníticos y calcáreos se desplomaron un 47,2%. También cayó la venta de ladrillos huecos (-35,8%), yeso (-25,7%) y cemento portland (-27,2%), entre otros.
Además, el organismo nacional hace un seguimiento de la cantidad de puestos de trabajo registrados y de la superficie autorizada para nuevos proyectos, aunque ambos ítemes van con un mes de retraso. En abril, el empleo formal del sector retrocedió 16,8% y la superficie destinada a nuevas obras decreció un 12%.