El pasado 10 de septiembre el gobierno de Javier Milei cumplió nueve meses de gestión y son varias las preguntas que surgen relacionadas a cómo evoluciona la imagen del Presidente, cuál es el nivel de aprobación de su Gobierno, cómo funciona la paciencia de una sociedad que viene enfrentando el ajuste y cuál es el nivel de estabilidad de un Gabinete que ya sufrió varias bajas.
Este último punto es estudiado por el politólogo Javier Pablo Salinas, quien hace tiempo realiza un seguimiento detallado de los movimientos del Gabinete desde la llegada de La Libertad Avanza (LLA) al poder. Según sus últimos registros, esta misma semana se produjo una nueva baja en el Gobierno, correspondiente al presidente de Enarsa, Juan Carlos Doncel Jones.
Esta nueva salida engrosa la lista de funcionarios políticos despedidos o renunciados de la era Milei, que hasta el momento asciende a 67, lo que arroja un promedio de casi dos salidas por semana desde el 10 de diciembre de 2023, uno cada cuatro días de gestión.
Si hacemos zoom en las áreas, el 27% de las salidas corresponden al ministerio de Capital Humano, el más grande de todos a cargo de Sandra Pettovello, mientras que el ministerio de Economía, al mando de Luis Caputo, se ubica en segunda lugar con el 25%. La lista la completan la Jefatura de Gabinete con el 13%, el ministerio de Salud con el 6% y el ministerio de Justicia con el 4%. Los problemas de gestión conviven con la profundización de las medidas de ajuste y con un modelo económico que genera cada vez más preocupaciones en la población.
Las últimas semanas de gestión
Las últimas dos fueron semanas de fuerte volumen político para el Gobierno, que incluyeron el veto a la reforma jubilatoria, la represión a los jubilados, la foto de festejo del asado en Olivos y la presentación del Presupuesto 2025 que por un lado contó con una magra audiencia, que se tradujo en una baja de diez puntos de rating, y un discurso en donde anunció la profundización del ajuste y ratificó su mensaje contra las provincias y el Congreso, tras anticipar que vetará cualquier proyecto que atente contra el equilibrio fiscal.
“Las últimas semanas fueron muy malas para el Gobierno en términos de opinión pública. El rechazo al veto fue del 65 % transversal a cualquier tipo de voto. El apagón del rating en la cadena del Presupuesto fue un golpe fuerte porque no se lo esperaban. En nuestros estudios aparecen casos de desencantados que dicen que ya no lo pueden escuchar porque les da bronca la política económica”, describe Santiago Giorgetta, director de la consultora Proyección.
La contundencia del rechazo al veto presidencial sobre la reforma que buscaba compensar las jubilaciones mínimas cosecha rechazos en diversas consultoras. En el caso de Analogías, registraron que el desacuerdo con el veto es del 63,7%, al tiempo que un trabajo de Opina Argentina indica que un 59% ve de forma negativa la decisión presidencial, mientras que el apoyo al veto es mayor en los votantes de LLA.
Por su parte, el director de Zuban Córdoba, Gustavo Córdoba, advierte en su último informe que “algo está empezando a funcionar mal en términos de credibilidad y confianza” porque hoy la sociedad le reclama resultados concretos a un Gobierno que, a su criterio, “actúa como si siguiera en la campaña electoral”.
En ese sentido, el último estudio publicado indica que, dentro de las frases pronunciadas recientemente por el Presidente y su grado de credibilidad, un 76,2% opina que es mentira que “las tarifas de agua, luz y gas están regaladas”, mientras que un 70,6 % cree que es mentira que “el poder adquisitivo de jubilados voló”.
Para Giorgetta, la estabilidad política que supo construir el Gobierno viene con un descontento social muy grande que cae de forma consecutiva hace cuatro meses. “Tenemos el peor registro de estos nueve meses en el mes de septiembre, tenemos los peores registros en caída de optimismo y de rumbo económico y sobre todo la expectativa económica a futuro, donde más de la mitad de los argentinos creen que van a estar peor de acá a fin de año y solo un 30% cree que va a estar mejor”, relata.
Algo de eso también se ve en el último estudio de Zuban Córdoba, donde un 55,1% consideran que el país va en la dirección incorrecta desde que asumió Milei, mientras que el número se eleva a 57,3 en cuanto a la desaprobación de la gestión libertaria. “Si lo comparas con los cuatro presidentes anteriores, Milei está 20/25 puntos por debajo de aprobación, con lo cual los problemas son los 3 años que le quedan por delante porque ha consumido un volumen de capital político importante”, observa Córdoba, quien registra una caída en la imagen de Milei de casi un punto y medio mensual.
Y adelanta: “La proyección es que a fin de año puede estar debajo del 40% de aprobación con un rechazo superior al 60%. Las condiciones económicas son determinantes para esto. Ahí está la gran clave”, analiza. En base a eso, ata la suerte que tendrá LLA en las elecciones intermedias al rumbo económico: “Si vas con la economía en recesión el voto castigo es inexorable. El gobierno de Milei todavía no ha logrado conformar un horizonte”.
Al ser consultada por el balance de estos nueves meses, la directora de Trespuntozero, Shila Vilker, detalló que “lo que dominó los primeros nueves meses es una aprobación constante, totalmente amesetada en torno a los 50 y 52 puntos, que lo explica fuertemente el control de la inflación”.
Sin embargo, en las últimas semanas notó una caída en el nivel de aprobación producto de medidas como el aumento de las tarifas, del transporte, el veto a los jubilados, el anuncio del veto al financiamiento universitario, entre otros puntos, que “son elementos que inciden en este descenso del Gobierno”.
Las principales preocupaciones
El último estudio de Proyección muestra que las principales preocupaciones de las y los argentinos residen en cuestiones económicas. La lista la encabeza la inflación con un porcentaje de 48,2%, seguido por los bajos salarios en 40,4 % y en tercer lugar los impuestos y aumento de tarifas en un 33,7%. La inseguridad aparece en el cuarto lugar de preocupación con un 33,2%.
“Está la novedad de que los bajos salarios son la segunda preocupación de los argentinos y la tercera el valor de los servicios públicos. Es una novedad que las primeras tres preocupaciones a nivel nacional sean económicas y desplacen a la inseguridad al cuarto lugar”, resalta Giorgetta. También pone el ojo en el 23,6% que se muestra preocupado por el desempleo, ya que “es una variable que viene creciendo de forma sistemática y que en diciembre estaba por debajo del 7%”.
Ligado a las preocupaciones económicas, la consultora Circuitos exhibe que un 50,8% no está de acuerdo con el paquete de medidas que impulsa Javier Milei y que un 35,9% considera que los principales beneficiarios son los grandes empresarios, mientras un 26,6% cree que la casta política se beneficia.
Asimismo, y en sintonía con otros estudios, empieza a aparecer cierto cansancio y un sentimiento de incertidumbre frente a lo que viene. La última encuesta de Circuitos muestra que el 54,1% de los consultados considera que las medidas económicas tendrán un alto impacto en la economía personal, mientras un 43,9% de los consultados piensa que la situación económica puede empeorar en los últimos meses,
Sobre este punto, Vilker señala que “en las últimas dos semanas empezó a verse un impacto negativo en la aprobación de gestión que va de la mano de un incremento de la preocupación por la inflación, que venía estando a la baja y había cedido como primer problema”. Si bien aclara que “hoy no es el primer problema, sí empieza a crecer nuevamente”.