En diálogo con Cazador de Noticias, el dirigente del Partido Socialista Auténtico de Mar del Plata – Batán, Pablo Aceto, planteó que “en medio del cruce que mantiene con el gobierno de Javier Milei por la apertura de las importaciones al acero chino, Paolo Rocca podría avanzar con despidos masivos en Ternium, la acería del Grupo Techint, que podría alcanzar a 300 empleados directos de la planta y otros 300 tercerizados, argumentando la caída de la producción y las complicaciones que acarrea la apertura de importaciones”.
Acto seguido, cuestionó que el CEO del Grupo Techint, que dirige Tenaris, Ternium, y otras compañías que operan en ingeniería, construcción, y el sector energético, “dice que la cancha está inclinada a favor de la producción de acero chino, pero esa inclinación de la cancha bajo ningún punto de vista es culpa de China”.
En tal sentido, recordó que “la Sociedad Mixta Siderúrgica Argentina (Somisa), que fue una emblemática empresa creada en 1947 por el presidente Juan Domingo Perón como parte del Plan Siderúrgico Nacional del ingeniero militar Manuel Savio, que más facturaba en el país y su principal competidora era el Grupo Techint a través de su empresa Siderar, que ahora es Ternium Siderar”.
“En los años ´90 – prosiguió - , con la privatización y con la intervención de María Julia Alsogaray se le entrega Somisa al grupo Techint, que lo que hizo fue destruirla para terminar con la competencia hacia su empresa. De hecho, gran parte de sus líneas de producción fueron a parar a Brasil, donde también este grupo de capitales nacionales con oficinas centrales en Luxemburgo - cosa que no se entiende muy bien por qué - , con lo cual destroza la industria metalúrgica argentina, que queda reducida a chapas laminadas y hojalata”.
En tal sentido, recalcó que “lógicamente, los chinos que no entregaron la producción de acero a gente como Paolo Rocca o grupos como el grupo de Techint, desarrollaron la industria metalúrgica e inclinaron, por supuesto, la canchada a su favor, pero lo que sucedió con Somisa no es responsabilidad de los chinos, sino de las políticas privatizadoras de los 90 que han destruido sistemáticamente toda posibilidad de desarrollo moderno de la industria y la economía argentina”.
Asimismo, subrayó que “un final parecido al de Somisa tuvo Altos Hornos Zapla, que fue el primer centro siderúrgico de Argentina, donde se realizó la primera colada de arrabio el 11 de octubre de 1945, en cuya privatización, que significó el final de un proyecto económico-social concebido desde la modernidad, también participó el grupo Techint”.
“No es de los chinos de quienes la Argentina se tiene que cuidar, sino de gente como Paolo Rocca y el Grupo Techint, que se han dedicado a destruir no solamente la industria metalúrgica, sino que ahora se apoderan de activos estratégicos vinculados con la energía, donde los argentinos evidentemente, también, estamos perdiendo y tampoco va a ser por culpa de China”, concluyó.