Roberto Dromi murió a los 79 años en la madrugada de este domingo afectado de una serie de enfermedades que dañaron su salud hasta terminar con su vida.
El ex funcionario fue ministro de Obras Públicas y una pieza clave en las privatizaciones de las empresas estatales realizadas durante el gobierno de Carlos Saúl Menem.
El ex funcionario fue uno de los impulsores del proyecto y fue quien colaboró para la concreción del traspaso de las empresas públicas al plano privado.
Roberto Dromi nació el 11 de abril de 1945 en Mendoza. Fue intendente de la capital provincial durante la última dictadura militar entre 1980 y 1981.
Entre los años 1983 y 1989 fue asesor jurídico de las cámaras de Senadores y Diputados de la Nación.
Durante su gestión, como ministro de Obras Públicas, nombró a Rodolfo Barra como uno de sus subsecretarios, que con quien, cuando fue juez de la Suprema Corte, redactaron en conjunto la Ley 23.696 de Reforma del Estado, que permitió la privatización de las empresas de telefonía, gas, agua, luz, ferrocarriles y la petrolera YPF.
Su frase célebre fue: “Nada de lo que deba ser estatal permanecerá en manos del Estado”.