La Argentina, el país de las vacas y de la leche, tiene los quesos más caros del mundo. Así lo aseguró un informe comparativo que puso como ejemplo el caso del queso reggianito, que en una conocida cadena local de supermercados se vende a casi 76.000 pesos el kilo (o 75,8 dólares), más de lo que cuesta en Estados Unidos, Europa o los Emiratos Árabes.
Al describir la insólita situación, el relevamiento de la consultora Miglino y Asociados destacó: "A diferencia de Europa, Estados Unidos, Brasil, México y Dubai, el queso se ofrece como producto suntuario con precios cada 100 gramos". Según el relevamiento, el valor en promedio de los cuatro quesos más consumidos (con un dólar oficial a $ 1.000) es de U$S76 para el reggianito; U$S38, el provolone; U$S 21, la muzzarella: y U$S 13, para el port salut. El valor por kilo de esos cuatro quesos es el más alto del mundo.
El informe se realizó en más de 1.100 comercios de todo el país (Coto, Carrefour, Disco, Jumbo, Vea, Casino y otros), supermercados chinos y queserías y fiambrerías de barrio, aclaró la entidad. Entre sus principales puntos, destacó que en la Argentina se consumían en la década de 1970 unos 12 kilos de queso por persona y por año, y al día de hoy por la carestía que afecta al tradicional producto, la demanda bajó a cuatro kilos.
"En nuestro país, cuatro tipos de quesos se llevan el 98% de todas las ventas. Marchan adelante el queso fresco, pategrás y port salut, que por tratarse de variedades únicamente locales, las agrupamos en port salut", aclararon desde la consultora. "A esa primera variedad le siguen los quesos provolone y reggianito, y cierra la muzzarella, cuyo consumo se ha disparado con la crisis en atención a que puede darte una buena pizza casera, picadas y otras comidas para preparar en casa", agregaron.