Tras la prórroga del congelamiento de las dietas hasta el 31 de marzo y la desactivación de otro escándalo, los senadores percibieron un aguinaldo de casi 2,5 millones de pesos gracias a la dieta “13”.

Se trata de un nuevo sistema que añadieron en la polémica sesión de abril pasado cuando aprobaron a mano alzada y sin debate el incremento en sus sueldos que pasó de 1,7 millones a 4,5 en mano, aproximadamente.

En aquella sesión, el recibo de los senadores se compone de 2.500 módulos y una adicional de 1.000 por gastos de representación. A ese combo le añadieron 500 módulos extra por desarraigo, que no cobran al menos cuatro senadores residentes en la ciudad de Buenos Aires.

Los casi 2,5 millones de pesos del “medio aguinaldo” surgen de los 4,9 bruto que perciben los representantes provinciales, que con los descuentos se posicionan en 4,5 millones de pesos en valor neto.

Se lo denomina dieta 13 porque fue agregada una dieta a las 12 que originales. El autor del proyecto fue el senador peronista -no K- Juan Carlos Romero (Salta), de los más benévolos con el oficialismo a lo largo del 2024 y con una visita reciente a la Casa de Gobierno.