Pese a llevar varios años alejada de la farándula argentina, Natalia Denegri se mantiene vigente como una de las figuras más importantes de la televisión de los 90'. Y aunque si bien emprendió una carrera lejos del país, ahora volvió a generar controversia luego de que saliera a la luz su peculiar vínculo con Javier Milei.
Radicada en Miami desde hace varios años, la famosa mediática logró hacer una carrera en el país extranjero y consolidarse como una reconocida empresario. Tanto así que formó parte de un famoso evento de los Estados Unidos que tendrá como invitado especial a Milei.
Horas antes de la asunción de Donald Trump a la presidencia, se realizó un evento que, entre la comunidad latina, fue considerado como “el evento del año” y la “gala de habla hispana más importante”. Se trata del Official Hispanic Inaugural Ball, que fue una de las principales recibidas de Milei en Washington, donde Denegri formó parte como representante argentina y una de las principales anfitrionas. Sobre la presencia del presidente en el evento, Natalia fue consultada por La Nación y sorprendió al mostrar apoyo hacia él: “Que Javier Milei sea reconocido en este evento es un orgullo para los argentinos; su liderazgo y las reformas que está impulsando son un ejemplo de transformación histórica”.
Precisamente, la organización responsable del evento cuenta con 19 miembros honorarios, entre los que se encuentran senadores, gobernadores y destacadas figuras de la política estadounidense, como Robert F. Kennedy Jr. y Donald Trump Jr. Además, en un segundo nivel, la organización incluye una extensa lista de más de 60 “anfitriones y asesores”. Entre estos nombres, resalta para los argentinos el de Natalia Denegri, quien forma parte del “Host Committee”.
Natalia Denegri fue una figura mediática en la televisión de los años 90 en Argentina, sin embargo, con el paso del tiempo supo construir una imagen que la diferencia mucho de aquellos años. Desde hace un tiempo Natalia se convirtió en una reconocida empresaria gastronómica con su exitosa cadena de restaurantes Baires Grill.
Derecho al Olvido: la Corte Suprema falló contra Natalia Denegri y a favor de Google
La Corte Suprema de Justicia revocó la sentencia que favorecía a Natalia Denegri en su demanda contra el gigante Google por el “derecho al olvido”, tras considerar que la información que circula sobre ella en programas de televisión de la época de los 90 “no lesiona su derecho a la intimidad”. Se trata del caso que abrió por primera vez el debate sobre este concepto surgido en 1990 y que tiene que ver con la facultad de las personas a exigir que eliminen o bloqueen un dato personal tras considerar que afecta sus derechos fundamentales, con el fin de proteger sus datos personales, el derecho a la privacidad y el derecho al honor.
“No se advierten elementos de entidad que den sustento a su postura y conduzcan a tener por descartada la existencia de su consentimiento en la difusión de la información que hoy cuestiona”, consideraron en 2022 los integrantes del máximo tribunal.
La Corte hizo hincapié en “el derecho social a la información de los individuos que viven en un Estado de democrático”, invocando la defensa de la libertad de expresión. Esa libertad, entendió el fallo, “también comprende el derecho de transmitir ideas, hechos y opiniones a través de internet y los motores de búsqueda, herramienta que se ha convertido en un gran foro público por las facilidades que brinda para acceder a información y para expresar datos, ideas y opiniones”.
En el fallo, la corte no negó la existencia de un “derecho al olvido”, pero no lo consideró aplicable al caso Denegri aunque dejó entreabierta la posibilidad de acciones preventivas contra los motores de búsqueda en internet.
Este argumento en particular, uno de los más importantes en la sentencia de los Supremos, fue cuestionado por el abogado de la denunciante. En diálogo con El Destape, el abogado Martín Leguizamón recordó que "está acreditado en el expediente que ella iba al programa extorsionada y amenazada. Se olvidaron de eso". De todas formas, consideró que “aun así hubiera ido con consentimiento, Denegri tenía derecho a pedir el derecho al olvido”.