A poco más de diez días del anuncio de cierre, las dos cooperativas que trabajaban para el frigorífico Sur Trade de Guanahani y Edison continúan con su reclamo por trabajo o indemnización. “No le pedimos plata, le pedimos que nos ayude a conseguir otra planta”, reclamaron.

Además de Rosamar, que tiene convenio con Sur Trade hace dos años, la cooperativa San Pablo también es parte del reclamo: en este caso, se trata de personal tercerizado que fileteó la materia prima del frigorífico durante 20 años.

Pese a que los fileteros damnificados -que sumarían unos 50- se agolparon este martes a las puertas del frigorífico, no pudieron hablar con nadie: suponen, por los autos que estaban en la puerta de la fábrica, que había “reunión de los que deciden”. La idea, si antes no hay novedades, es concentrarse en el lugar en el transcurso de la semana.

A fines de enero, cuando se enteraron del cierre, Marcela Ibarrola, secretaria gremial del Sindicato de Obreros de la Industria del Pescado (Soip), refirió que “las razones de la empresa (para cerrar) son que no les rinde el trabajo, pero el tema es que a ellos no les rinde y se quejan hace mucho tiempo pero siempre se corta por el hilo más delgado que son los trabajadores”.