Como cada año, la fiesta cristiana en honor al Patrono del Pan y el Trabajo comenzaron con el primer minuto del 7 de agosto. El miércoles a las 23.30 se inició la festividad, con una vigilia, que devino a medianoche en la apertura de las puertas del santuario, ubicado en Moreno 6776, e ingresaron los peregrinos con sus espigas para pedir, agradecer o ser parte de las liturgias.
Sobre el lema de la convocatoria: “Peregrinamos, con San Cayetano, sembrando esperanza”, el párroco David Ochoa explicó: “Lo elegimos especialmente para Mar del Plata en alusión a la idea de caminar todos juntos, no solos, sin dejar a nadie en el camino. Y sembrar el trabajo se refiere al esfuerzo, el sacrificio, y la esperanza por el Jubileo del Año de la Esperanza, que es un tiempo de perdón”.
Esta es la primera celebración de Ochoa como párroco del santuario y la describió como “una experiencia nueva, con mucha movilización de tanta gente que viene a compartir esta fiesta”.
Asimismo, Ochoa reflexionó: “La gente que está vendiendo aquí afuera también es parte de la fiesta de de nuestro santo, al igual que los que vinieron a agradecer, a pedir salud o trabajo. Creo que San Cayetano es el que concede la gracia de aquello que están necesitando; da esa confianza de saber que tenemos un amigo que intercede por nosotros”.
