Se sustrajeron un collar perteneciente a la cultura Omahuaca del Noroeste argentino, pieza única de aproximadamente 600 años de antigüedad realizado en roca lapizlázuli, puntas de flechas y proyectiles tipo Ayampitin, donadas por el Museo Histórico de Jujuy en el marco de las II Jornadas Homenaje a Guillermo Magrassi,  y campanillas de cobre de carnaval también del norte argentino correspondientes a la época de dominación incaica.

Expresa el Director del Museo, Carlos Mertens, que esto no es casual, aparte de haber robado pertenencias correspondientes a la Sociedad de Fomento Alfar -entidad anfitriona desde hace seis años- el material arqueológico sustraído fue elegido deliberadamente ya que con las piezas se llevaron los carteles explicativos.

También se verificó el robo de una lupa binocular que se usaba para el área de investigación y para las visitas didácticas. Este instrumento había sido adquirido en enero de 2004 con mucho esfuerzo ya que es muy caro.  

Mertens continúa diciendo que este tipo de robos de tesoros arqueológicos e históricos  que constituyen piezas únicas, el caso del museo Magrassi se suma como un caso más al los recientes robos del reloj del General Manuel Belgrano, las piezas sustraídas al Museo de la Casa Rosada, el penitente en el Museo de Salta, los huevos de dinosaurios y piñas fosilizadas de la Patagonia expuestos en una subasta en los EE.UU y las continuas sustracciones de objetos que se hicieron en el Museo de Luján.

Agregan los responsables del Museo que en el año  2003  se sancionó la Ley Nº  25.743  de Protección del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico y a pesar del esfuerzo que realiza la Oficina de Registro Arqueológico dependiente del Instituto de Cultura de la provincia de Buenos Aires, estos ilícitos siguen ocurriendo lo mismo que coleccionistas inescrupulosos  con el consecuente comercio ilegal de estos bienes patrimoniales.

El robo ocurrió en la madrugada del día  lunes 3 haciendo pública la información 48 horas después para permitir las pericias policiales.