El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, anunció este jueves que su país decidió concederle asilo diplomático al fundador de Wikileaks, Julian Assange, tras casi dos meses de haberse refugiado en la embajada del país sudamericano en Londres.
El funcionario justificó la decisión en el “riesgo para la seguridad y la integridad” de Assange, los “indicios de represalias” por parte de los países afectados por las revelaciones de WikiLeaks, las “contradicciones de la fiscalía sueca que han impedido el derecho a la defensa” y la protección de los derechos humanos.
Además, dijo que Estados Unidos, Reino Unido y Suecia “no dieron garantías necesarias” para evitar una persecución política.
¿Salida?
Sin embargo, todavía no está confirmado que Assange pueda abandonar el Reino Unido, cuyas autoridades emitieron una orden de arresto contra el periodista y exhacker australiano.
El gobierno británico dijo el miércoles que tiene el derecho legal a entrar en la embajada y arrestar a Assange.
“No podemos permitir que el proceso se vea entorpecido y burlado por una comunicación oficial que agrede a Ecuador”, dijo Patiño al hacer el anuncio en Quito.
“Ecuador es un Estado libre y soberano, no sujeto a tutelaje de ningún tipo”, añadió, y recordó que -según la ley internacional- las sedes diplomáticas son inviolables.
La cancillería de Reino Unido había asegurado que tenía la obligación legal de extraditar a Assange a Suecia, donde es requerido por delitos sexuales que él niega.
Assange temía que su envío a Suecia provocase su entrega a los Estados Unidos, donde se podría enfrentar a cargos de alta traición debido a las filtraciones de Wikileaks.
Fuente: BBC